Destrozos por absolución en un caso de abuso

Neuquén

Matías Subat

NEUQUÉN (AN).- Familiares y allegados de la joven que había denunciado ser abusada sexualmente por un gendarme, disconforme con el fallo que absolvió al imputado, al mediodía de ayer atacaron a pedradas el frente de los tribunales de la calle Yrigoyen y luego su vivienda. Los incidentes alcanzaron singular violencia, puntualmente en la casa del absuelto, quien, se dijo, ya no vive en lugar. La absolución se fundó, según la sentencia, en que el resultado del perfil genético realizado a la víctima demostró que el semen que se detectó no se corresponde con el del imputado, sino con el de otra persona. El fallo fue leído por los jueces María Gagliano y Martín Marcovesky. También lo firmó la doctora Carina Álvarez, quien por encontrarse en otra audiencia no participó de la lectura. La sentencia fue unánime. En el organismo rompieron vidrios de los ventanales del primer piso y realizaron pintadas y en la casa, en el barrio Don Bosco III, provocaron destrozos en una camioneta que se encontraba en el interior, a la que incendiaron y luego arrojaron al arroyo Durán, y en el frente y las aberturas. Ante la violencia de las agresiones la Policía de Neuquén dispuso la intervención de personal de la comisaría del barrio para frenar primero los ataques y luego montó una guardia ante la amenaza de que continuaran las agresiones. Se trata del caso de la chica de 21 años que denunció que tras los festejos de Año Nuevo había sido abusada por el uniformado, de apellido Cabral, que revestía como sargento, quien era vecino suyo. Según se informó oportunamente cuando ocurrieron los hechos, la joven, familiares y amigos habían celebrado la fecha en la Isla Verde. Fue cerca de ese sector donde fue abusada. Funcionarios judiciales confirmaron que de acuerdo a los exámenes médicos se concluyó que la relación sexual no pudo ser consentida, como posteriormente había argumentado el acusado en su defensa.