Christian Buteler: “Los números tienen que cerrar, pero a la vez el país tiene que poder funcionar”
ENTREVISTA │ Sobre el cierre de un año vertiginoso en materia monetaria y cambiaria, el especialista dialogó con RÍO NEGRO y se explayó sobre los anuncios recientes. Indicó que el proceso de desinflación puede ser más lento, y anticipó la necesidad de volver a rollear deuda.
El gobierno termina un año económico turbulento con un aterrizaje suave. Christian Buteler es economista e inversor. Por su rigor y su expertise en el análisis macroeconómico, suele ser fuente de consulta en medios de todo el espectro ideológico. En esta entrevista con RÍO NEGRO, charlamos sobre el año que pasó y el que se viene.
PREGUNTA: El plan económico ¿viene siendo consistente?
RESPUESTA: Fue un año difícil. El 2024 había terminado con la economía rebotando, pero ese rebote se frenó en febrero o marzo de este año. Empezó a haber volatilidad con el tipo de cambio porque el mercado decía que era insostenible. El gobierno insistió y terminó pidiendo un rescate al Fondo Monetario Internacional (FMI) y modificaando el régimen cambiario. A partir de ese momento, la economía, en el segundo trimestre de este año, cayó. Y apareció otro problema que fue la decisión de no acumular reservas. Durante la liquidación del campo, que es el momento en que generalmente el Banco Central aprovecha para comprar dólares, decidió no hacerlo, poniendo por delante la meta de la desinflación. Ahora tenemos un mercado cambiario entre bandas y para evitar que el dólar se acerque al techo, el gobierno no compra para que esa oferta de dólares quede en el mercado y empuje el tipo de cambio hacia abajo. Decían que el dólar iba a llegar al piso de la banda y que recién ahí iba a comprar. Bueno, no sucedió. A eso se sumaron algunos errores en materia monetaria, como el desarme de las LELIQs, que le puso más volatilidad al mercado de pesos. Luego llegaron las elecciones y el segundo rescate, que fue el del Tesoro Americano.
P: ¿Fue un rescate?
R: El gobierno dice que no, que fue un apoyo. Pero fue un rescate. Si no hubiese sido por el Tesoro americano vendiendo dólares, las bandas cambiarias no hubiesen soportado. Si bien vos si tuviste una una fuerte demanda y el Tesoro tuvo que vender 2.000 millones de dólares, la realidad es que fue menor a la que hubiese sido si el único defendiendo la banda cambiaria era el Banco Central, que tiene reservas netas negativas y obviamente no hubiese podido sostener demasiado el tipo de cambio.
P: El gobierno también tuvo algunos éxitos, ¿no?
R: Sí, mantener el equilibrio fiscal. Para mí, es la carta más importante que tiene. Es el centro de su programa económico. Es positivo porque Argentina no tiene forma de financiarse y entonces, con desequilibrio fiscal, debería usar la emisión monetaria, que termina generando inflación. Aún así, la inflación no tuvo el recorrido que esperaba el gobierno. Hizo piso en mayo cuando tocó el 1,5%, y a partir de ahí, de los seis meses siguientes, en cinco la inflación se aceleró, terminando ahora en noviembre con 2,5%. Pero ganaron aire y margen para hacer las reparaciones que el programa requiere al haber ganado las elecciones.
El anuncio sobre reservas buscó generar expectativas y eso se logró. Pero a la compra de dólares se le puso bastante condicionantes. Se dijo “vamos a comprar dólares siempre y cuando haya un crecimiento de la demanda de dinero y cierta profundidad en el mercado de cambios”.
P: Con respecto a los anuncios ¿hay voluntad de corregir lo que el mercado y el FMI criticaban?
R: En todo el mercado, incluso entre quienes pensamos distinto sobre muchas cosas, había un consenso generalizado de que necesitaban recomponer reservas de forma genuina, no a través de créditos. Ya se agotaron los recursos de última instancia, como el FMI y el Tesoro de los EEUU. El gobierno empieza a intentar convencer realmente al mercado de su buena gestión y de la sostenibilidad del programa. Y para comprar reservas, tuvo que modificar las bandas cambiarias.
P: ¿Es adecuada la modificación de las bandas cambiarias?
R: La modificación fue parcial: las bandas se mantienen, pero cambió la forma de actualización. Eso va a permitir que el dólar no se atrase en términos reales contra el peso, teniendo en cuenta el resto de los precios de la economía.
P: ¿Hay un guiño al mercado con la desición de comprar reservas?
R: Si, pero a la compra de dólares se le puso bastante condicionantes. No es que acá hay un programa que especifica fechas o cantidades. Se dijo “vamos a comprar dólares siempre y cuando haya un crecimiento de la demanda de dinero y cierta profundidad en el mercado de cambios” y además, se mira qué pasa con la inflación. Se buscó primeramente generar expectativas positivas. Y eso se logró: fijate que los bonos subieron fuertemente tras el anuncio.
P: ¿Estas modificaciones pueden impactar en la inflación?
R: Actualizar las bandas por inflación puede generar que baje más lentamente. El techo de la banda era un punto importante en el ancla inflacionaria. Si en vez de al 1% se actualiza al 2,5%, que es lo que va a pasar en enero, ese ancla es un poco menos fuerte. Bajar la inflación es necesario y estamos todos a favor, pero también hay que mirar las otras variables y hay que recomponer reservas. La economía no es una sola variable por la cual se soluciona una cosa mágicamente todas las demás se acomodan.
P: ¿Cuál es el panorama con ladeuda el año que viene?
R: Tenés el vencimiento de enero, el de junio y después otros con organismos internacionales. Aún en una economía con equilibrio fiscal necesitas dólares para rollear la deuda. Han sido dos años muy difíciles en ese en ese punto. Hizo falta una ampliación de crédito del FMI y un repo bancario para cumplir porque Argentina, al no tener acceso a los mercados, tuvo que renovar esos vencimientos con capital, o sea, pagándolos prácticamente de contado. Formas de financiamiento que no son las mejores ni las ideales. El gobierno va a volver a apostar como en 2024 y 2025 a la apertura del mercado del crédito. Creo que va a ser nuevamente uno de sus objetivos principales. Para eso, hay que recomponer reservas y eso va a bajar el riesgo país. Fijate que el anuncio del lunes ya hizo que perfore los 600 puntos. Ahora hay que demostrarlo. El mercado espera ese tweet del BCRA diciendo: “Hoy intervenimos, compramos tantos dólares.”
Hay que volver al orden monetario que se perdió este este año con la suba de encajes, la baja de encajes y la obligación a los bancos a renovar deuda. Además, lo cambiario todavía no está resuelto: el sistema que se anunció es mejor que el de antes, pero no es el ideal.
P: ¿Cómo ve la actividad económica?
R: Si bien el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) mostró que en el tercer trimestre la economía no cayó, cuando miramos adentro, vemos que sectores muy importantes como la industria, el comercio y la construcción (que algo ha recuperado, pero desde el quinto subsuelo) todavía no llegan a los valores previos a la crisis que inició allá por marzo del 2023. Siguen muy golpeados. Y esos son los sectores que más mano de obra generan. A su vez, el empleo privado desde noviembre de 2023 a septiembre de este año, cayó en 158.000 puestos de trabajo. Está muy bien que se maximicen los segmentos de petróleo, gas, minería y agro, pero no podemos hacer un país exclusivamente de esos sectores.
P: El 2026, en cuanto a la actividad, ¿es una incógnita?
R: Sí. Acá tenemos un problema de velocidad: estamos abriendo la economía muy rápido respecto a la baja de impuestos que se le da a los industriales para que compitan. Esas velocidades deberían ser lo más parecidas posible para no tener estos impactos negativos sobre la actividad. No vemos ninguna medida en ese en ese sentido, por lo tanto el 2026 va a seguir siendo difícil en materia de economía real.
P: ¿Qué otros aspectos cree relevantes para lo que viene?
R: Que mantenga sus logros y saque un presupuesto con equilibrio fiscal. Eso sería una buena señal. También hay que volver al orden monetario que se perdió este este año con la suba de encajes, la baja de encajes y la obligación a los bancos a renovar deuda. Me parece que lo cambiario todavía no está resuelto: el sistema que se anunció es mejor que el de antes, pero no es el ideal. Después, es importante inviertir en infraestructura: no se puede seguir con cero obra pública para que cierre el número. El número tiene que cerrar pero el país tiene que funcionar y poder crecer. Y llegamos a un momento, en que no hay tanto margen para que cierren los números bajando gastos.
Perfil
Christian Buteler es un economista independiente e inversor financiero.
Con una extensa experiencia laboral en los bancos Galicia, ABN AMRO y Santander Río.
Actualmente es presidente de la Consutora BSF (Buteler Servicios Financieros).
Columnista habitual en Ámbito Financiero y colaborador regular con medios económicos de prestigio nacional e internacional, aportando análisis profundos sobre la economía argentina y global.
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