Pymes en Río Negro, entre la caída del consumo y el aumento de los costos
Cámaras empresariales y comerciales de la costa, la cordillera y los valles coinciden en trazar un panorama “complejo” que los obliga a “resistir”. La falta de dinero en los bolsillos tiene impacto y se registra desde hace unos meses el financiamiento con tarjeta de las compras de alimentos.
“En muchos locales está el dueño sentado esperando que entre un cliente”, graficó un referente comercial rionegrino para exponer la crítica situación que transitan las micropymes, y las pequeñas y medianas empresas en la provincia ahogadas por la caída del consumo, el incremento de los impuestos y servicios, y la falta de financiamiento.
Según un informe del Observatorio Pyme (con datos del tercer trimestre de 2024) Río Negro tiene una densidad empresarial de un 12,4 cada 1.000 habitantes, un indicador por encima de la media nacional, que es de 12,1. La mayor concentración de pymes está en el departamento Bariloche (entre 16,4 y 24,2 cada 1.000 habitantes) y en segundo orden (entre 11,2 y 16,4) en el departamento Roca (que incluye la ciudad homónima y Cipolletti) y Adolfo Alsina (Viedma).
En total, hay 9.272 pymes de las cuales 556 son industrias; 25 compañías de software y servicios informáticos; 1.614 prestadoras de servicios productivos y comercio mayorista; y 7.077 distribuidas en distintos rubros.
Esas pymes son generadoras de empleo y movimiento económico en todas las jurisdicciones, según destacan las cámaras empresariales que observan una realidad crítica, por un lado, pero que aún los mantiene con expectativas de mejorar y por eso resisten.
“Estamos en un momento difícil, no hay plata en la calle, el consumo cayó entre un 30 y un 40%, la gente compra en el supermercado con tarjeta de crédito y en cuotas”, señaló a RÍO NEGRO Walter Sequeira, presidente de la Federación de Entidades Empresarias de Río Negro (Feern), quien afirmó que “estamos más complicados que en pandemia”.

Leonardo Marcasciano, titular de la Federación de Entidades Empresarias de Bariloche, habló de una “situación compleja” y un combo que afecta al sector: “Aumento de costos, ventas que no llegan a los niveles esperados y no hay reactivación del consumo”.
Para el empresario, el consumo se reactivaría con la “recuperación del salario” en todas las órbitas, estatal y privado, un tema pendiente ajeno a lo que puedan inferir las pymes.
Mariano Katz, presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Producción de Valle Medio, también apuntó al gran problema del consumo: “Se nota que a la gente no le alcanza, financian la compra de comida con tarjetas de crédito y este cambio se evidencia más en los últimos tres o cuatro meses”.
Sequeira además puso el foco en que en 2024 “la Patagonia perdió todo subsidio y aumentaron los servicios, eso provocó cierres porque hay pymes que no pueden pagar la luz y ahora se espera el impacto del gas”, afirmó y señaló a modo de ejemplo la crisis que atraviesa la empresa Alpat en San Antonio, que gestionó sin éxito un alivio en los costos del gas, necesario para su producción.
Daniela Tauro, presidenta de la Cámara de Agricultura, Industria y Comercio de Roca, también entendió el tema de costos como uno de los puntos más críticos para el sector: “Lo que más afecta es la carga tributaria y los aumentos de los servicios y es difícil de sostener, es asfixiante”, valoró y remarcó la lucha que desde las entidades dieron para frenar el último aumento de la electricidad pretendido por Edersa, que finalmente por decisión política del gobernador Alberto Weretilneck se consiguió.
Tenemos que inventar nuevas estrategias para sortear las dificultades de la caída del consumo”.
Daniela Tauro, presidenta de la Caic de Roca.
Desde Bariloche, Elián Caramichos, titular de la Cámara de Comercio e Industria local, acotó otra arista que impacta en las pymes como “la presión que aumenta la exAfip (hoy ARCA) en los tiempos, los juicios y las tasas por mora”.
Katz además recordó el impacto que sintieron los comercios a comienzos de este año con la quita de la bonificación por Ingresos Brutos que aplicó la Provincia.
Hay expectativas
A pesar del diagnóstico complejo, Marcasciano cree que todavía hay “expectativas” de que se dé una mejora porque “hay un cambio de paradigma y por ahora se aguanta, se trata de aggiornar, los precios están quietos y después del levantamiento del cepo que tuvimos una suba de los proveedores, se retrotrajeron esos aumentos, pero aún falta la pata del consumo”.
También Tauro afirmó que “expectativas siempre hay” y en el caso particular de Roca y el Alto Valle en general, “siempre estamos esperando el famoso derrame de Vaca Muerta, pero tenemos un factor importante que limita y es el estado de la Ruta 22”, afirmó y dijo que iniciaron rondas de conversaciones con todos los gobiernos desde el nacional, provincial y municipal en pos de llegar a una solución: “Los pueblos se desarrollan por las vías de comunicación y nosotros no tenemos aeropuerto, no tenemos tren y la ruta la tenemos como está”.

En el Valle Medio y la zona Atlántica aguardan un impacto de la construcción del oleoducto de Vaca Muerta Sur que todavía tiene un movimiento económico “acotado” en las zonas cercanas donde se inició la construcción.
Para conseguir mejoras con los grandes desarrollos energéticos que se vienen en Río Negro, Sequeira dijo que es fundamental aumentar la exigencia del compre rionegrino y que cada municipio también lo implemente, para que los comercios y pymes regionales puedan ser proveedoras en el oleoducto y todos los proyectos que se vienen.
Para defender a las pymes necesitamos mejorar el compre rionegrino, que suba a un 15% por lo menos para poder competir”.
Walter Sequeira.
La necesidad de un banco provincial
Los representantes de las entidades empresarias y cámaras comerciales consultados coincidieron en valorar como un problema la falta de una banca pública provincial, que pueda ofrecer líneas de financiamiento para inversiones y subsistencia con tasas preferenciales, como sí lo tienen sus pares de Neuquén, Chubut, La Pampa y Buenos Aires, solo por nombrar las provincias limítrofes.
Río Negro no tiene banco propio, aunque la Provincia tiene un mínimo de participación accionaria en el banco Patagonia, el agente financiero, donde cuenta con una banca en el directorio.
“Es fundamental tener un banco que pueda ofrecer meses de gracia para líneas de financiamiento, tasas preferenciales. Hoy ningún privado acompaña a los emprendedores y pymes chicas”, dijo Walter Sequeira de la Federación de Empresas.
“El crédito bancario es muy caro y más en esta perspectiva de caída de las ventas. En una situación de retracción el crédito es usado para pagar aguinaldos y la luz”, afirmó Mariano Katz, presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Producción del Valle Medio.
Lo cierto es que -por ahora- no hay planes de reactivar un proyecto para que la provincia vuelva a tener un banco propio, mientras tanto, el Gobierno prepara para hoy el lanzamiento de la nueva Agencia de Desarrollo Económico y Productivo, que preside Sergio Iglesias, que absorbió lo que hasta hace dos años fue el Crear, a través de la cual se esperan líneas de apoyo a las pymes.
El sector empresario del Alto Valle mantuvo conversaciones iniciales con los responsables de la nueva área a quien le trazaron el panorama de las pymes días atrás. Aguardan para hoy anuncios vinculados a acceso al financiamiento para aumentar la productividad en el acto previsto para el mediodía en la sede de la Caic donde se espera la participación del gobernador Alberto Weretilneck.
Bariloche y el efecto de las compras en Chile
Bariloche tiene una situación particular por su dependencia del turismo y el fenómeno de las compras en Chile.
Este mayo es un mes de temporada baja “como hacía muchos años no existía”, afirmó Leonardo Marcasciano, presidente de la Federación de Entidades Empresarias de Bariloche, quien remarcó que “si el turismo está deprimido y no se reactiva en corto y mediano plazo quizá se vea un escenario de cierres”, que por ahora no ocurre más allá de las bajas de habilitaciones estacionales.

Además, el dirigente empresarial valoró que “ser una ciudad cercana a la frontera afecta en forma directa por la diferencia excesiva en los precios de algunos productos”, reconoció en relación a Chile.
Dijo que los residentes e incluso turistas que llegan a Bariloche hacen escapadas a Chile donde combinan “paseo con compras baratas” y afirmó que en el caso de los productos electrónicos y electrodomésticos chicos “es imposible competir”, más allá de que de este lado de la frontera se puede acceder a financiamiento con tarjeta de crédito.
Para Elián Caramichos, presidente de la Cámara de Comercio, mermó en los últimos meses los viajes de compras: “El poder adquisitivo cayó tanto que bajaron las compras en Chile, ya no se ven las largas colas en la aduana como en el verano”, afirmó.
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