El CPEM 69 cumple diez años de enseñanza en Cuenca VX

Luis García

El colegio nació por requerimiento de los propios vecinos del barrio neuquino.

NEUQUÉN (AN).- El CPEM 69, el único secundario de Cuenca XV, cumplió el 2 de abril diez años de enseñanza. Nació como demanda de adultos del barrio que querían terminar sus estudios secundarios y tras varios traspiés lograron tener un edificio propio y reducir los índices de repitencia, siendo este año la escuela con el menor número de egresados con materias adeudadas. Hoy habrá actos durante todo el día y la ministra de Educación, Zulma Reina, hará entrega de una cocina industrial y un freezer.

Para esta escuela nada fue fácil. Las primeras clases se dictaron el 2 de abril de 2003 en aulas prestadas de la primaria 347. En el receso de invierno la provincia inició la construcción del edificio propio que se terminó en el 2004, pero recién fue entregado en mayo de ese año. “En realidad desembarcamos en la escuela, porque la tuvimos que ocupar, nos la entregaron después de una manifestación que hicimos en el Consejo Provincial de Educación”, relató la directora Patricia Varela. Además recordó que, como no fueron consultados, “la escuela no está adaptada a las necesidades edilicias”.

“Cuando crearon la escuela la crearon pelada, no teníamos ni un diccionario, ni un mapa. Una profesora nos donó un viejo planisferio, que estaba desactualizado, tenía la URSS, pero era lo único que teníamos. Y después pedimos la donación al diario “Río Negro” de enciclopedias que sacaban, con eso estudiaban los chicos”, recordó Varela.

En el 2009 recién lograron tener un tanque de agua y un transformador de luz propio, y al día de hoy no cuentan con un nicho de gas por lo que “toman” el gas de la escuela primaria (que está al lado) lo que genera que haya aulas a las que la calefacción no llega. Tampoco tienen salón de usos múltiples ni gimnasio.

A pesar de estas adversidades, Varela resaltó que el año pasado lograron tener el menor índice de repitentes de toda la provincia y que este año son la escuela con menos egresados que adeudan asignaturas. “Tenemos seis alumnos en esas condiciones cuando el promedio es de 20”, detalló. Queda por trabajar el abandono y la retención de los estudiantes. “Las tentaciones son enormes de las bandas”, reveló.

También destacó el compromiso de los docentes y auxiliares de servicio. “Muchos eligieron dejar las escuelas del centro para venir acá, otros trabajan ad honórem, ponen plata de sus bolsillos para comprar materiales para la escuela, y así seguimos”, enfatizó la directora.