“El vínculo padre-hija”

La hijas, nenas, madres, sufren a veces de dolores y angustias inexplicables. Esto les puede afectar en su vida relacional social, sexual, en el trabajo y en lo más intimo de sus parejas. Ciertas mujeres sufren de una baja autoestima, complejos de inferioridad, se sienten inútiles como personas y en el ámbito femenino. Muy inseguras de su propia identidad, se apoyan a veces sobre muletas que creen fuertes pero que al fin y al cabo no dan satisfacción, otras se resignan a sufrir en una piel que desconocen. Pasan sus vidas en la búsqueda de una respuesta fundamental inconsciente: ¿Qué es ser una mujer? ¿Qué es lo femenino? Lo hijos/as se construyen como sujetos en diferentes etapas que comienzan, en ciertos casos, antes del embarazo. Los hijos se imaginan antes de que nazcan y después se construyen en una realidad que está determinada por los padres o cuidadores. Las hijas toman direcciones distintas a la de los hijos en un punto de su construcción. La mirada materna y paterna en este caso es primordial, porque va mostrando desde el sexo opuesto la posición femenina en el contexto psicosocial. Las hijas necesitan el apoyo paterno permanente, lo que les da seguridad, confianza y una buena construcción armoniosa y equilibrada. La mirada bondadosa, cariñosa y humanista va forjando la figura femenina para que ésta pueda afianzarse como mujer más tarde. Las nenas tienen que aprender del papá lo máximo que puedan, estimular permanentemente un intercambio que permita el aprendizaje de cosas de la vida y del trabajo. No hay que discriminar ciertas facetas con el sólo hecho de decir que son mujeres y que no es para ellas, todo lo contrario, la relación entre padre e hija tiene que estar basada en una confianza que le permita a ella sentirse fuerte y capaz. Las hijas serán más felices y la relación entre los padres será mucho más accesible y en un clima de paz si se mantiene una construcción afectiva y honesta con nuestros hijos. Vamos papás e hijas, todavía hay tiempo para empezar una nueva relación, algo nuevo, una nueva descubierta de nuestra posición de padres. Osvaldo Corsino DNI 7.688.604 Neuquén

Osvaldo Corsino DNI 7.688.604 Neuquén