En el hospital se excusan de atender a Freydoz

Laura Frank

CIPOLLETTI (AC).- Susana Freydoz contrajo una infección intrahospitalaria y a pesar de que está en condiciones de salir de la terapia intensiva, el hospital de Cipolletti no tiene un sector intermedio para alojarla. Además, los médicos se excusaron de atenderla porque están siendo investigados por presunta mala praxis. Freydoz está respirando por sus propios medios pero continúa internada en terapia intensiva porque el hospital de Cipolletti no tiene un área de terapia intermedia. Los médicos tampoco autorizaron el traslado al sector de internación y parte de los profesionales ya no quiere atenderla porque el fiscal Oscar Cid los está investigando una supuesta mala praxis. La situación de la mujer se encuentra en un estado de indefinición y su salud se está agravando. En un primer momento le practicaron una traqueotomía porque el respirador le provocó lesiones en la garganta y en las cuerdas vocales. Después salió del coma inducido pero contrajo una infección intrahospitalaria que le afectó la vejiga. La paciente está débil, bajó mucho de peso y no puede caminar si no la ayudan los enfermeros. Desde que recuperó el conocimiento no logra fijar la mirada y sus familiares presumen que ese estado es consecuencia del daño neurológico, aunque todavía no le realizaron ningún estudio. Freydoz cumplió 62 años el 18 de abril pero como estaba inconsciente nunca se enteró de que sus hijos la visitaron para saludarla. Por estos días, sólo recibe la asistencia de una kinesióloga porque los psicólogos abandonaron el tratamiento. Hace un mes, la Cámara Primera de Roca resolvió enviar a Freydoz a una cárcel común. La mujer fue condenada a 18 años de prisión por el asesinato de su marido el exgobernador de Río Negro Carlos Soria. El día que se dispuso el traslado, Freydoz se encerró en el baño de la habitación del hospital y tomó una importante cantidad de pastillas, que se presume habría acumulado durante el tratamiento. Después se desmayó y quedó inconsciente. Fue sometida a una lavaje de estómago y terminó internada en terapia intensiva. Comparte la sala junto a otros cinco pacientes. De acuerdo con el dictamen de los forenses, Freydoz padece un aguda depresión caracterizada por un profundo deseo de morir. En esta situación, la mujer fue internada en Cipolletti y comenzó a recibir tratamiento psiquiátrico. Cuando la condenaron por el crimen de su marido, el tribunal mantuvo esa medida pero el 11 de abril los jueces resolvieron enviarla a la cárcel de Roca. Por ahora no se conoce si esta decisión sigue en pie o será revisada.