Enseñarán a jugar al rugby a los presos para reducir la reincidencia

Antonio tomó con fuerza la guinda entre sus manos, ante la mirada de una decena de personas que lo rodeaba y con resignación manifestó: “Discúlpennos pero nosotros somos bastante escépticos con esto. Todo el tiempos nos traen proyectos y ninguno se cumple”.

Lo que continuó fue un silencio momentáneo en el patio interno de la U11. El lugar estaba lleno de policías penitenciarios, representantes de la fiscalía, del poder ejecutivo provincial y algunos entrenadores y jugadores de rugby.

Al lado del recluso había otros siete internos, uno de ellos era David, quien asentía las palabras de su compañero mientras en sus manos sostenía un libro titulado: “No permanecer caídos. La historia de los Espartanos”.

La escena transcurrió ayer por la mañana en el penal provincial del Parque Industrial de Neuquén. Unos minutos antes se había firmado en la Ciudad Judicial un convenio entre el Ejecutivo Provincial, la fiscalía de Neuquén, la Asociación de Rugby del Alto Valle y Eduardo Oderigo, presidente de la Fundación Espartanos. El acuerdo pretende llevar un proyecto de esparcimiento e integración muros adentro de la unidad penitenciaria.

Espartanos es una organización que está inserta en 54 cárceles del país para enseñar el rugby a los reclusos, con el objetivo de promover su reinserción en la sociedad.

Como parte del convenio los integrantes de la Fundación Espartanos se comprometieron a mejorar el terreno de un sector de la U11 que se ubica en la parte posterior del penal, en el patio extramuros.

Se proyectó que en el año 2020 se construya una cancha de césped sintético para que los internos puedan continuar con su preparación.

El proyecto Espartanos comenzó hace 10 años. Hasta la fecha se instaló en 17 provincias, tiene más de 2.000 personas que participan del deporte en las cárceles y 54 equipos de rugby conformados en igual cantidad de penales.

Oderigo sostuvo que en los lugares donde se desarrolló la propuesta, el porcentaje de reincidencia es de un 5%, mientras que en las cárceles donde no se implementó, llega a 65%.

El inicio de las actividades todavía no fue establecido. Explicaron que un grupo de voluntarios de la Asociación de Rugby del Alto Valle comenzará a asistir una vez por semana al complejo par a comenzar las prácticas. Estas serán una vez por semana, por espacio de dos horas.

Sin embargo ayer se realizó el primer entrenamiento con un puñado de internos y profesores, quienes realizaron ejercicios básico del deporte.

La idea es que el próximo encuentro, se multiplique la cantidad de asistentes.