Tan Biónica en la Fiesta de la Confluencia 2024: este sábado será una noche mágica

En la madrugada del 17 de febrero de 2023, hace casi un año, Chano era ingresado de urgencia al sanatorio Otamendi y su estado, además de reservado, era un misterio. Muchos temieron, una vez más, lo peor. Sin embargo, dos semanas después, el músico recibió el alta médica tras dos semanas de internación y avisaba que volvía a los escenarios.

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¿Tan pronto? Sí, y funcionó. Y sorprendió. Y sorprendió aún más cuando ese regreso al escenario apenas un mes después de aquella internación, fue también el regreso de Tan Biónica. El del 17 de marzo en Lollapalooza 2023, era el día en que debía presentarse Chano y así fue.
Lo que no estaba en ninguna grilla era la reunión con sus viejos compañeros Bambi (que además es su hermano), Seby y Diega, es decir, los Tan Biónica. La banda que había dado el golpe a la mesa del pop argentino en los albores del siglo XXI volvía a tocar después de siete años. ¡Vaya modo de volver, Chano!

Desde entonces, lo que oficialmente era la última noche mágica se convirtió, a lo largo de todo el año pasado, en un fenómeno de estadios impensado. Porque al show de Lollapalooza le siguió una gira nacional que incluyó espectáculos en Córdoba y la Plata, entre otras ciudades, pero sobre todo incluyó dos Vélez, el 28 y 29 de octubre, y un River, el ocho de diciembre. Este año, se presentó en Mar del Plata, entre otros lugares, y mañana lo hará en la primera de las cuatro noches de la Fiesta Nacional de la Confluencia 2024.

Tan Biónica, una historia en discos

La historia de Tan Biónica es la historia de los hermanos Moreno Charpentier, Chano y Bambi, pero sobre todo Chano y su carisma como frontman. Gestada a fines de los 90, la banda terminó de formarse en 2002 con Seby (guitarra), Bambi (bajo), Diega (batería) y el propio Chano al frente.
La (pre)historia dirá que su primer trabajo grabado fue un demo grabado en 2001 cuando la banda aún se llamaba Biónica Electrónica. En 2003, editaron el EP Wonderful Noches, donde ya mostraban su costado tecno pop que los llevaría a ser una de las bandas más importantes de su generación.

El primer disco fue Canciones de Huracán (2007), pero será con el segundo, Obsesionario (2010), que lograrán el reconocimeinto masivo a partir de dos su canciones: “Biutiful” y “Ella”.
En 2013, editaron Destinología, que incluía el hitazo “Ciudad mágica”. En este trabajo, Chano, que había escrito todas las canciones, mostró su capacidad para descifrar el pulso bailable de la época sin perder el costado rockero del pop argentino.
El disco dio lugar al Tour Destinológico,​ una gira musical que concluyó el 7 de diciembre de 2014 con un concierto en el Hipódromo de Palermo ante más de cien mil personas. Tan Biónica ya era para entonces uno de los grupos más convocantes de la escena.

A mediados de 2015, la banda editó su cuarto y último disco, Hola mundo, al que le fue muy bien, pero sin alcanzar el éxito de sus antecesores. Su difusión quedó, sin embargo, eclipsada por un accidente automovilístico que Chano protagonizó el 5 de agosto de 2015.
Esto llevó a que se postergaran los conciertos que la el grupo tenía programados del 13 al 16 de agosto en el Luna Park como presentación oficial del álbum, que finalmente se realizaron del 28 de septiembre al 1º de octubre. Dicha seguidilla de conciertos fue presentada como La vuelta al mundo 360 Experience. Al año siguiente, la banda se desmarcó y cada uno de sus integrantes desarrollaron proyectos solistas.

Días antes de tocar en la Fiesta Nacional de la Confluencia 2024, Tan Biónica anunció su gira por España, en mayo.

Chano editó tres discos: El otro (2018), El doble (2019) y El camino (2020). Mientras, alternó situaciones complejas de salud que preocuparon a sus fans. La última, la de hace casi un año. Y de allí al escenario de Lollapalooza.
Aquella noche en el hipódromo de San Isidro fue un reencuentro feliz con el público, pero también con sus compañeros de banda, a quienes invitó a tocar algunos temas. Fue el comienzo (in)esperado de una extensa gira de noches mágicas como seguramente será la de mañana, en la Isla 132, a orillas del río Limay.