Esperan por una nueva prórroga de la emergencia frutícola

En abril vencerá la vigencia de la última prórroga otorgada a la ley de emergencia frutícola. La senadora Silvina García Larraburu junto a Alberto Weretilneck, presentó un pedido de extensión de la medida por otro año. Si no prospera, el sector frutícola deberá hacer frente al pago de 3.000 millones de pesos por los diferimientos impositivos de los últimos años.

Cuando restan pocas semanas para la finalización de la vigencia de la ley que determinó la emergencia frutícola, productores de peras y manzanas y las cámaras de la región que los nuclean, esperan por una nueva prórroga que otorgue mayor plazo para el pago de obligaciones impositivas y de la seguridad social tanto con AFIP como con Anses.

La senadora Silvina García Larraburu, con el acompañamiento del senador Alberto Weretilneck, presentó en los últimos días el pedido para una nueva prórroga de la emergencia frutícola sancionada a través de la ley 27.354.

La última prórroga a la ley de emergencia frutícola fue sancionada en 2019 y su vencimiento está pautado para abril; que en caso de no tener una nueva extensión, implicará que el sector productivo tenga que hacer frente a un pasivo que ronda los 3.000 millones de pesos con la AFIP debido a las tres prórrogas consecutivas que se aplicó a la ley.

El pedido de prórroga ya había sido planteado por referentes de Cafi en una reunión que en enero mantuvieron con el titular del área de Agricultura de Nación, Luis Basterra, aunque hasta el momento no hubo avances respecto a la medida.

Por su lado la senadora rionegrina, presentó el proyecto para que se establezca una nueva prórroga “por el término de 365 días la emergencia económica, productiva, financiera y social a la cadena de producción de peras y manzanas de las provincias del Río Negro, Neuquén, Mendoza, San Juan y La Pampa, declarada por la ley 27.354 y sus modificatorias”.

Al mismo tiempo, una vez que se apruebe la extensión del beneficio, facultar el ejecutivo nacional “a instrumentar regímenes especiales de prórroga para el pago de obligaciones impositivas y de la seguridad social por parte de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES)”.

Larraburu en la nota de elevación del proyecto remarcó que “el 85 % de la producción argentina de manzana (765 millones de kilos) y el 75% de la de pera (675 millones de kilos) se concentran en el Alto Valle de Río Negro y Neuquén y en el Valle Medio de Río Negro”.

Insistió en que de ese volumen, la producción de Río Negro y Neuquén representa “el 95% de las exportaciones en fresco e industriales. Argentina es el principal exportador de peras con 460 millones de kilos, le sigue en orden de importancia China con 430 millones y la Unión Europea con 260 millones de kilos”.

“El complejo frutícola del Alto Valle factura 1.000 millones de dólares anuales, de los cuales más de la mitad corresponde a las exportaciones. En el exterior, las manzanas y peras rionegrinas tienen tres grandes compradores: Rusia, la Unión Europea y Brasil que, por diversas razones restringieron sus importaciones de frutas argentinas”, agregó en el detalle del pedido de prórroga de la emergencia frutícola.

La senadora apuntó que por la situación de crisis que atraviesa la cadena productiva de Río Negro y Neuquén, es necesaria “prorrogar dicha emergencia a fin de que el complejo frutícola sea beneficiado con regímenes especiales para abordar la problemática compleja del sector, es que considero de importancia dicha iniciativa”.


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