Estrena “Solilokia”: caos creativo, deseo y actuación
El unipersonal escrito por Leticia Torres y Laura Romero, quien además lo protagoniza, estrena este domingo, a las 21, en Te.Ne.As.
Una actriz decide desplegar su derrotero de posibilidades expresivas en un encuentro con el público. Cumplir el sueño de actuar los textos y personajes que siempre quiso. En esa pulsión aparecerán como tema el deseo y el gozo en todas sus formas, y así hablará con todas las letras, sin tapujos y mucho humor, de aquello que esta actriz/mujer quiere contar, como si fuera una revelación espiritual. De esto se trata “Solilokia”, el unipersonal protagonizado por Laura Romero, quien también es su coautora, junto a Leticia Torres.
“Solilokia” estrena hoy con una función a las 21, en Te.Ne.As. (Leguizamón 1785, Neuquén), con entradas a $700. Se pueden adquirir a través de Mercado Pago (Alias: solilokia / CVU: 0000003100089970713905). Las autoras dialogaron con Río Negro.
P: ¿Cómo se les ocurrió esta pieza?
Leticia Torres: Este espectáculo se fue creando de a poco, partió de una propuesta espacio que creé de manera virtual y presencial que llamo “caos creativo”, que consiste en trabajar con los y las artistas en la recolección y organización del material posible de ser llevado a escena para luego concretarlo en una puesta. Laura quería darse el espacio para desplegar todos sus colores, sus posibilidades como actriz, o al menos las que en este momento tenía ganas de mostrar. Así fuimos pensando y armando este proyecto que tiene la impronta de Laura y en el que yo cumplo el rol de acomodar y organizar las ideas. Primero tomamos los dos elementos más claros que teníamos a partir de las imágenes y cuestiones que ella quería trabajar y las desarrollamos: el deseo y la actuación. Buscamos en las imágenes recurrentes, los personajes que siempre quiso ser, los textos que la movilizan, todo asociándose libremente con nuevas ideas para dejar aparecer los “monstruos” como llamamos a cada uno de los personajes que fueron dejándose ver.
P: ¿Cómo fue el proceso creativo?
Laura Romero: El proceso creativo llevó exactamente un año, cinco meses y 24 días. Todos los encuentros/ensayos los realizamos de manera virtual a través de la plataforma Zoom, una vez por semana, desde mi casa en Fernández Oro y Leti desde la suya en Buenos Aires. En agosto de este año viajé a Buenos Aires y realizamos cuatro encuentros intensivos presenciales, ahí terminamos de ajustar la dramaturgia y la puesta en escena. En paralelo fuimos trabajando en el diseño de vestuarios y de la escenografía
P: ¿Qué disciplinas se fusionan en esta propuesta?
Leticia: El trabajo de actuación partió del cuerpo (cara, voz, movimientos) que cada personaje tiene, armando para cada uno verdaderas máscaras para luego llenarlas de verosimilitud. La propuesta era la de encontrar en las máscaras que Laura mima creaba la verdad en el decir y en el hacer. Por momentos el registro de actuación está más ligado a los clownesco, en otros es más realista, aunque nunca naturalista.
P: ¿Cuál es el aporte de la música y como interactúa con la actriz?
Laura: En la puesta es un hilo conductor muy importante en la aparición de los diversos personajes en la escena, cada tema musical que aparece es un estímulo sonoro para ir hacia los diferentes tipos de registros de actuación. Jugamos también con el clima que cada música puede generar en una escena y de cómo esto modifica la acción.
P: ¿Cuánto hay de autobiográfico en este unipersonal?
Leticia: El trabajo dramatúrgico fue una creación de ambas, a partir de las improvisaciones que iba pautando en cada encuentro sobre los disparadores que aparecían. Del trabajo de improvisación fuimos recolectando los textos que surgían para plasmarlos y corregirlos entre semana hasta darle la forma final. Algunos textos surgieron por fuera de los ensayos, sobre todo los del personaje que llamamos la “Mujer neutra”, que es la que va enlazando un personaje con otro y organiza el recorrido. Es la que más habla de la actuación en sí, del trabajo propio de la actriz, que es un tema que nos une a las dos.
Laura: Los personajes que fueron surgiendo surgieron de algunos trabajos hechos en otros momentos de mi carrera, o los fuimos creando a partir de ideas que aparecían en los encuentros. Creo que la obra no habla de mi vida, pero sí habla de mí y de lo que me inquieta y preocupa. La obra habla del deseo, de perseguirlo y del gozo también, algo que me parece importante visibilizar. Se habla poco del gozo femenino en el teatro y me parece una buena oportunidad para darle un poco de espacio. Es otro de los derechos que mujeres tenemos que reivindicar me parece. También el poder disfrutar del propio cuerpo, amarse como una tal cual es y valorizar lo que queremos y deseamos.
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