Evacuaron líquidos cloacales en un canal neuquino

Neuquén (AN).- El presidente del Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS), Marcelo Lazcano, confirmó ayer que el organismo «derivó» líquido cloacal a través del canal pluvioaluvional de Rohde para «aliviar» la saturación de las napas en los barrios aledaños al «Ruca Che».

El funcionario no especificó desde cuándo se lleva a cabo la operación, aunque aclaró que los líquidos vertidos corresponden a «una cantidad menor para el volumen de agua que lleva el canal Rohde», dijo.

Lazcano aseguró que se optó por «el mal menor» al verter allí los líquidos cloacales debido a que «realmente no había otra solución: de lo contrario el líquido estaba en las calles y baldíos», en la zona del Ruca Che. «Incluso había charcos», señaló.

Quienes no compartieron la medida fueron los vecinos de San Lorenzo Sur. Las familias que viven frente al desagüe -sobre la Rohde- entre las calles Belgrano y la multitrocha, la zona habitada en la cual el trazado no está entubado, están indignadas.

Aseguran que el mal olor frente se siente «hace varios meses» y en especial los días de calor. Muchos indicaron que se cansaron de reclamar a la municipalidad «y de allí le pasan la pelota al EPAS, mientras, esto es una inmundicia», indicaron. Temen además que el líquido cloacal se convierta en un foco infeccioso que propague enfermedades.

«Fue una solución de compromiso y fue absolutamente temporaria», justificó Lazcano. Aseguró que en los próximos días comenzarán a operar los dos «by pas» que se construyeron específicamente para canalizar el excedente cloacal hacia la planta de tratamiento en Tronador al fondo. Describió que el desagüe se utilizó a modo de «by pas» cuando las cloacas comenzaron a surgir de las bocas de registro y fluir por las calles en las zonas aledañas al estadio Ruca Che e inclusive en la zona cercana a la calle Rohde, dijo.

Explicó que cuando se vieron desbordados operativamente porque los líquidos cloacales fluían inclusive desde las casas, se optó por verter el deshecho desde la estación de bombeo -en Rohde y República de Italia- hacia el canal ubicado frente a las instalaciones.

El canal Rohde fue construido para canalizar el agua de lluvia y desagotarlas en un arroyón que finalmente termina en el río Limay. Actualmente además del mal olor, presenta una situación de abandono ostensible: con basura estancada en los sifones, pedazos de neumáticos, ruedas enteras y envases de todo tipo en el trazado a cielo abierto.

Sin embargo, Lazcano minimizó los efectos contaminantes del vertido cloacal por considerar que el exceso cloacal que se evacuó «fue menor» para la cantidad de agua que trae el desagüe.

Dijo que una vez que se inauguren los dos trazados construídos para canalizar el exceso de líquidos, el EPAS realizará una limpieza del canal Rohde. Consideró que la copiosa lluvia que cayó hace 15 días atrás favoreció para la limpieza del desagüe.

De las dos obras realizadas, informó que el «by pas» sobre la calle Moritán está prácticamente en operación, en tanto el principal, ubicado sobre la calle Rufino Ortega, será conectado en estos días al ducto principal que transporta el líquido hasta la planta depuradora. El valor total de ambos trabajos trepó a unos 400.000 pesos, indicó Lazcano. El más importante fue el que será conectado mañana y que canalizará el exceso del área norte hacia el colector principal en el bajo.

El trazado incluyó desde Rufino Ortega a la avenida del Trabajador, calle 12 de Septiembre para bajar por Bejarano hacia el colector principal ubicado en la zona del bajo.