Federico y Marité, de las milongas roquenses al Mundial de Tango
Marité Lucena (29) y Federico Carrizo (32) son dos bailarines del Alto Valle que lograron imponerse ante decenas de parejas de la Patagonia y ya se preparan para el Mundial de Tango 2019, que se desarrollará en el estadio Luna Park de Buenos Aires, en dos meses. Se trata de dos docentes del Instituto Universitario Patagonico de Artes (IUPA) de Roca, que sueñan con lograr el máximo objetivo que tienen los apasionados del 2 x 4.
Si bien esta pareja de baile se conformó hace menos de un año, hace una semana brillaron en la pista de las Preliminares del Mundial que se realizó en Bariloche. Marité y Federico lograron el primer puesto en la categoría de tango de escenario y serán los encargados de representar al país ante grandes bailarines del mundo y un jurado de renombre.
Ambos bailarines resaltaron que llegaron al mundo del tango de una forma inesperada. Los dos conocieron esta danza en su adolescencia y una vez que la descubrieron no se pudieron alejar y continuaron formándose hasta convertirse en la dupla promesa de Argentina.
“Cuando tenía 17 años me sumé a un taller de tango pero con el único objetivo de conquistar a una chica, no iba pensado en la danza. Pero me encontré con un universo que terminé amando más que a cualquier otra cosa” recordó Federico. Pero Marité a los 19 años, cuando llegó a Roca desde Tucumán, ya tenía un acercamiento al mundo de la danza pero no al tango. “Yo vengo de un pueblo muy chico donde no hay muchas cosas para hacer. No sabía nada del tango, lo descubrí cuando llegué al IUPA y fue un camino de ida. Desde eso momento no dejé nunca de bailarlo y aprender”, agregó la joven.
A solo dos meses de la gran competencia mundial, que tendrá como escenario uno de los teatros más importantes del Buenos Aires, la pareja continúa ensayando todas las semanas tratando de alcanzar su nivel máximo. “Como yo vivo en Allen y además trabajo en el petróleo y mi compañera viven en Roca y también tiene sus trabajos hay días que se nos complica mucho juntarnos. A pesar de ello seguimos, ahora más que nunca, ensayando 3 veces por semanas y dejando lo mejor de cada uno en esas dos horas”, comentó Federico.
Para ellos la cuenta regresiva comenzó y sueñan con levantar bien algo la bandera, no solo de la región sino también la del país. “Nos animamos a soñar en grande y acá estamos, a un paso de lograr un objetivo muy importante. Ojalá este camino recorrido nos permita dedicarnos de lleno a esto y vivir de lo que más amamos que es el tango”, finalizó la bailarina.
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