Consultorio Inclusivo

Hay más de 250 personas trans en Río Negro, según el registro de la Asociación de Trans y Trabajadoras Sexuales (ATTS). Pero su acceso a la salud es complejo. De hecho, en toda la provincia, hay sólo dos espacios pensados para atender sus demandas: el consultorio inclusivo que fue inaugurado el 22 de marzo en Cipolletti y el hospital Ramón Carrillo, de Bariloche, que fue pionero y sigue siendo el más avanzado de toda la provincia en la realización de vaginoplastias, las cirugías de reasignación sexual.

“En Cipolletti y Bariloche hubo voluntad política, que es lo que falta en el resto de la provincia” asegura Georgina Colicheo, presidenta de la ATTS.

Lo cierto es que los dos lugares se ocupan de demandas distintas. El de Cipolletti –que atiende de manera gratuita los miércoles desde las 14– se enfoca en los controles de salud y tratamientos de hormonización. En Bariloche, se hacen cirugías, y también los tratamientos.

La ley nacional de Identidad Género, promulgada en el 2012, determina los deberes del Estado con respecto a la atención en salud de las personas trans, entre otras obligaciones. La normativa indica que todas las prestaciones tienen que ser cubiertas al 100% desde todos los subsistemas de salud, sean públicos o privados.

“Nosotros tenemos la obligación desde la salud pública de hacer cumplir las leyes para que esas personas no se sientan discriminadas. La ley te marca una conducta a seguir”, dice la profesional de la salud y la directora del proyecto de Extensión, María Luz Riera, coordinadora del consultorio de Cipolletti.

Años atrás, un grupo de médicos del hospital público de Bariloche tomó la iniciativa para dar respuestas a la población trans. Las demandas de vaginoplastias se hacían a través de recursos de amparo, pero comenzaron a canalizarse directamente en el hospital público de la ciudad. “Podemos decir que en segundo nivel (esto es cirugías, hormonización y tratamientos de coinfección de VIH), nuestro hospital es el más avanzado en la provincia”, puntualizó la médica infectóloga Lucía De Labra.

En cuatro años, 5 chicas trans se sometieron a una vaginoplastia que consiste en la extirpación de los genitales masculinos que, a la vez, son reutilizados para generar genitales femeninos.

El urólogo Marcelo Sandoval explicó que “tiempo atrás, simplemente se hacían derivaciones al hospital Durand en la ciudad de Buenos Aires pero preferimos esperar un tiempo y traer al especialista para que realice la segunda etapa de la cirugía en Bariloche. Tuvimos el aval del Ministerio de Salud”.

De todos modos, no son muchas las personas trans que deciden operarse. La mayoría se inclina por los procesos de hormonización que el hospital garantiza desde el 2016.

En Cipolletti, las pacientes aún se sorprenden por el trato que reciben en el consultorio. “Les decimos que es lo que corresponde y ellos responden que no están acostumbrados”, asegura la coordinadora, que espera que algún día todo el sistema de salud pública del hospital “sea un espacio inclusivo y libre de todo tipo de discriminación”.

Las cirugías

más demandadas

Los profesionales del hospital Ramón Carrillo ya cuentan con una lista de espera de personas que aguardan para someterse a una “cirugía de masculinización de tórax” y es el próximo desafío del equipo interdisciplinario. Dos de los profesionales viajarán a Neuquén en los próximos días para solicitar una capacitación con un cirujano plástico neuquino experto en ese tipo de intervenciones.

En el último tiempo, también surgieron pedidos para la colocación de prótesis mamarias y estamos avanzando con el Ministerio de Salud de la provincia”.

Correo: consultorio.trans@gmail.com

Facebook: Consultorio Inclusivo “Claudia Pía Baudracco” – Cipolletti