Investigan la matanza de perros en barrios de Cipolletti

La fiscalía informó que tiene confirmado 10 casos de mascotas envenenadas en diferentes barrios de Cipolletti. La ola de perros que sufrieron la intoxicación comenzó en la plaza del barrio 12 de Septiembre hace tres semanas, pero luego se extendió a otros lugares como los barrios San Lorenzo y Del Trabajo.

El Ministerio Público Fiscal tomó muestras de suelo y agua en varios puntos de la ciudad donde se contabilizaron casos de envenenamiento. Las muestras fueron enviadas a un laboratorio local y en los próximos días estarán los resultados. Además se realizaron dos autopsias sobre un dogo y un ovejero que murieron envenenados.

Desde fiscalía informaron que no es sencillo determinar porqué vía se intoxicaron ya que los perros vomitaron el veneno. El veterinario Sergio Gómez realizó las dos autopsias que serán enviadas a Bahía Blanca para su análisis. Los estudios buscan determinar el medio por el que los animales fueron intoxicados. Luego de hablar con los dueños de varias mascotas damnificadas, desde la fiscalía dijeron que pudieron evidenciar “presencia de órganos fosforados en los cuerpos de las mascotas afectadas”.

La perra de Martín tenía dos años y murió en cuestión de horas. Su padre la sacó a pasear por la plaza Del Trabajo y cuando volvieron del recorrido, el animal comenzó con los síntomas. El animal empezó a tambalear seguido de vómitos diarrea hasta que colapsó. “Es un fertilizante químico muy fuerte que al contacto con cualquier animal es letal. Es un fertilizante que está prohibido en el uso de la agricultura”, explicó Martín.

A pesar de llevarla de urgencia a un veterinario no pudieron salvarla. “La trató con una droga que deshace lo que el veneno genera en el animal, porque no tiene un antídoto”.

Según la explicación del veterinario, el veneno genera que los pulmones se llenen líquidos que posteriormente ahogan al animal. El día que Martín llevó su perra, el veterinario atendió a más de 8 animales con la misma sintomatología, todos murieron.

Valeria Arreguy, que demás de ser jefa del departamento Zoonosis del municipio es veterinaria, atendió uno de los pocos casos en los que el animal logró sobrevivir. Fue un perro del barrio 12 de Septiembre que presentó los mismos síntomas tras dar un paseo con su dueño en la plaza. “Creemos que se trató de un organofosforado, pero no tenemos certezas”, aseguró.

Los animales mueren a las pocas horas de haber consumido el veneno. Aún no hay certezas sobre el producto utilizado para provocar la muerte.