Hay tribunal para el juzgamiento del fiscal y el juez de la dictadura cívico militar en Neuquén
Se los acusa de incumplimiento de deberes, omisión de justicia y prevaricato, en más de 25 hechos.
Los jueces federales Simón Bracco y Alejandro Silva integrarán el juzcamiento a los magistrados acusados como cómplices de las desapariciones. El juez Alejandro Cabral, se excusó (foto archivo Yamil Regules)
El primer juicio en Neuquén contra el exfiscal y el exjuez, acusados de ser cómplices del aparato de desaparición y torturas que desplegó la última dictadura en la región, ya tiene conformado su tribunal y está en los últimos pasos para iniciar en febrero las audiencias de prueba, que luego devendrán en una fecha cierta del juicio en 2023.
De las y los magistrados que fueron indagados en 2013, cuando comenzó la instrucción, llegaron a juicio Pedro Duarte y Víctor Ortiz, el primero ex juez federal designado en 1976 por los militares en el poder y ex fiscal de la zona el segundo. Se los acusa de incumplimiento de deberes, omisión de justicia y prevaricato, en más de 25 hechos.
Integrarán el tribunal de juicio los jueces Simón Bracco, Luis Foglia y Alejandro Silva, en todos los casos, magistrados federales que no son de Neuquén, aunque ya han intervenido en juicios de lesa humanidad en Bahía Blanca y Patagonia sur.
«Después de mucho trabajo y mucha tarea se puede llegar a vislumbrar el juicio que nosotros llamamos de los jueces de la dictadura», dijo el querellante por la APDH, Marcelo Medrano. La imputación contra los ex magistrados federales «es por delitos que tienen que ver con incumplimiento de deberes de funcionario público, pero también con participaciones en las privaciones ilegales de la libertad en la compresión de que eran parte del plan sistemático» de desaparición de personas, afirmó Medrano.
Aseguró que «hay mucha prueba» por la actuación cómplice durante el pedido de justicia de los familiares de detenidos por causas políticas a partir de 1976. «Estamos a la espera de que se pueda fijar una fecha, cuanto antes», señaló Medrano.
Duarte llegó a juicio luego de un despliegue intensivo de recursos defensistas en todas las instancias superiores, incluida varias veces la recusación del juez instructor, que hicieron más largo el tiempo de definiciones para el juicio.
«Esto va avanzar con premura, consideramos que todo lo que pasó en la instrucción, no va a ocurrir en el debate porque tiene una dinámica diferente y con tiempos acotados para ciertos planteos, esperamos rapidez para desarrollar con normalidad esta instancia», dijo el abogado.
La actividad judicial se reanudará en febrero, tras la feria judicial.
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