Piden que se lo declare culpable por estafar por 518.000 pesos al Colegio Médico de Bariloche

La defensa insistió en que las 16 transferencias bancarias fueron adelantos de sueldo. La sentencia se conocerá el 11 de mayo.

La fiscalía pidió que se declare culpable a Jorge Olguín por administración fraudulenta en el Colegio Médico de Bariloche. La sentencia resolutiva se conocerá el próximo 11 de mayo.

«Se encuentra acreditada la autoría. No está controvertido que hubo 16 transferencias de dinero de la cuenta del Colegio Médico a la caja de ahorro de Olguín, entre el 24 de noviembre de 2017 y el 25 de julio de 2019, que totalizan 518.000 pesos«, indicó el fiscal Gerardo Miranda y añadió que fueron «transferencias bancarias indebidas sin autorización».

Al término de la audiencia judicial, Olguín tomó la palabra: «Arranqué a los 16 años en el Colegio Médico, en el año 94. Vengo de una familia muy humilde. Mis padres son chilenos. Hoy, estoy sentado acá para limpiar el apellido de mi papá que tiene 82 años y es fletero. No merezco estar acá por algo que yo no hice».

Miranda se refirió a los argumentos de la defensa. «Se ha dicho que los adelantos de remuneraciones a los empleados era una práctica habitual no reglamentada. Y que esta transferencia fue autorizada por el secretario de Finanzas, Carlos Garate. Olguín reconoció que Garate era como su padre y que incluso, le ofreció el padrinazgo de uno de sus hijos. De modo que Garate no es objetivo», planteó el fiscal.

Mencionó la declaración de Garate quien aseguró que la mayoría de los adelantos de remuneraciones no se documentaban. «Esto fue rechazado por los testigos. El mismo presidente del Colegio Médico dijo que estas erogaciones de dinero debían documentarse para los estudios contables. Esa documentación quedaba, además, en el legajo de cada empleado», dijo.

Dijo también que si bien hubo adelantos de remuneraciones a otros empleados del Colegio Médico que no se registraron, «esto fue una maniobra de Olguín para desviar la atención y no ser descubierto«. «Al ser entrevistados, dijeron que hicieron la solicitud a Olguín y que ese dinero ya se devolvió», advirtió.

El abogado querellante Raúl Ochoa adhirió al planteo de la Fiscalía. Insistió en que la defensa no logró probar que existiera una mala relación entre Olguín con los integrantes de la comisión directiva del Colegio Médico, sino «todo lo contrario». «La mayoría de los testigos habló de la confianza depositada en Olguín. No había razón para dudar. Tampoco ha probado que la comisión directiva tuviera la necesidad de sacarse de encima a Olguín», admitió el abogado.

También hizo hincapié en la declaración de Garate: «Dijo que autorizó esas transferencias porque Olguín necesitaba cambiar los caños de agua y gas de su casa. Pero fueron 16 transferencias: ¿durante dos años estuvo cambiando los caños? Esto carece de todo sentido común».

El abogado defensor Sebastián Arrondo solicitó la absolución de Olguín. Volvió a argumentar que las transferencias se hicieron en concepto de préstamo. «Uno más de tantos que había sacado Olguín. Tenía la autorización del secretario de Finanzas, no de cualquiera», expresó.

«La intención de defraudar -añadió- lleva consigo la intención de ocultar y estas transferencias no fueron ocultas. Muchos empleados recibieron créditos sin la documentación respaldatoria: ¿por qué se pone la lupa sobre Olguín? Si fuera estafador, sin dudas, le iría muy mal«.

Consideró que tampoco se afectó el patrimonio del Colegio Médico ya que en ese caso, la institución hubiera iniciado una acción civil, «cosa que no hizo».


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