La cepa amazónica se expande por Brasil y San Pablo convoca a voluntarios

Las autoridades brasileñas confirmaron que en las ultimas 24 horas se registraron 1.800 nuevos decesos, con lo que la cifra total desde el inicio de la pandemia trepó a 262.770.

Con el avance de la variante del Amazonas del coronavirus en casi todo Brasil y con el colapso del sistema hospitalario, se vivió hoy una jornada de protestas contra la cuarentena, caos y filas de personas desesperadas por una vacuna en Minas Gerais y Río de Janeiro. Mientras que San Pablo convocó a voluntarios para ayudar a los médicos.

Las autoridades confirmaron que en las ultimas 24 horas se registraron 1.800 nuevos decesos, con lo que la cifra total desde el inicio de la pandemia trepó a 262.770.

El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió hoy a Brasil que la situación sanitaria «es muy seria» y le urgió a tomar «medidas agresivas» para atajar el nuevo rebrote.

«La situación es muy seria y estamos muy preocupados. Las medidas sanitarias que Brasil tome deberían ser agresivas, al mismo tiempo que avanza en la vacunación», dijo en rueda de prensa el jefe de la Organización Mundial de la Salud.

Varios especialistas, entre ellos el neurocientífico y médico brasileño Miguel Nicolelis, quien fue asesor ante la pandemia de los estados del nordeste, consideran que Brasil puede ser un «vivero» de nuevas cepas a raiz del tránsito diario de miles de personas en aviones y ómnibus de larga distancia atravesando biomas y climas.

Oficialmente, el laboratorio estatal Fundación Oswaldo Cruz divulgó el boletín epidemiológico en el cual afirma que seis estados ya tienen más de la mitad de sus contagiados de coronavirus con la nueva cepa.

El alerta para los países vecinos del Mercosur es que tres de estos estados son los que limitan con las provincias de Misiones y Corrientes: Paraná, Santa Catarina y Rio Grande do Sul, todos con 100 por ciento de su capacidad de camas UTI y con fila de espera.

En tanto que en San Pablo, el secretario de Salud, Jean Gorinchteyn, anunció hoy una «operación de guerra»: convocó a voluntarios profesionales de salud y de enfermería a sumarse a los hospitales.

«Los médicos y enfermeros no dan más, están exhaustos. Necesitamos ayuda porque estamos en guerra», afirmó. La capacidad hospitalaria de Sao Pablo llegó hoy al 77%, cuando era de 65 hasta hace 11 días.

El gobernador Doria anunció un nuevo hospital de campaña en la ciudad de San Pablo, la mayor ciudad del país que puede quedar colapsada en dos semanas.


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