La demanda de electricidad se desplomó en marzo en el país y la región

La demanda de electricidad se derrumbó en marzo en todo el país. La caída fue de casi el 10% con picos que llegaron al 48% en Catamarca. Los clientes de Edersa consumieron el mes pasado un 5% menos de energía que en 2018 y en CALF registraron una disminución del 6%.

Los hogares de la provincia Neuquén demandaron también un 6% menos que el año pasado.

Los datos surgen de los resultados que publica la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA (Cammesa), una empresa mixta manejada por la secretaría de Energía de la Nación que administra y regula la relación entre la oferta (generación y transporte) y la demanda (distribuidores) de energía.

El precio mayorista de la electricidad aumentó desde enero de 2016 un 2.000%, con un impacto en el precio final de las facturas que pagan hogares, comercios e industrias que, aunque diluido en otros cargos que tiene el servicio, se siente con fuerza.

Encima, en muchas jurisdicciones ese incremento mayorista se suma a los aumentos que lograron las distribuidoras como las cooperativas CALF (Neuquén) o CEB (Bariloche).

El resultado es un aumento que para las familias es fuerte y para la actividad económica, preocupante, especialmente para los que son dependientes de la energía eléctrica, como los frigoríficos, los galpones de empaque de fruta, los centros de esquí, la industria de la alimentación, etcétera.

Para el análisis de los comportamientos de la demanda hogareña de electricidad es clave conocer el nivel de la tarifa. En la región hay siete empresas o entes estatales que llevan la energía hasta las viviendas:

• Edersa es una empresa privada y la mayor distribuidora de la zona. Atiende toda la provincia de Río Negro, menos Bariloche y Río Colorado. Su tarifa es la más baja de la región, ya que no se sido actualizada de acuerdo con sus costos. Tiene una deuda por compra de energía de casi 2.900 millones de pesos. Sus ventas cayeron en un primer trimestre del año un 5%.

• EPEN es una empresa estatal. Distribuye la electricidad en las localidades medianas y pequeñas de Neuquén. Su tarifa acompaña el comportamiento de sus costos. Es proveedor de las cooperativas que no compran en el mercado mayorista y por ellas tienen una deuda de 450 millones de pesos con el sistema nacional. No tuvo variaciones de un año a otro en volumen de ventas.

• CALF es una cooperativa. Atiende el mercado de la ciudad de Neuquén y tiene la tarifa más alta de la región. Sus ventas cayeron entre enero y marzo un 6% en relación con el mismo trimestre del año pasado.

• Copelco es una cooperativa que vende energía en Cutral Co y Plaza Huincul. Le compra electricidad al EPEN; por lo tanto, sus volúmenes de demanda quedan englobados en los totales de la empresa estatal.

• Cearc: esta cooperativa suministra energía en Río Colorado. Se abastece de Edersa.

• Cooperativa de Servicios Públicos de Plottier. Le compra al EPEN.

• Cooperativa de Energía Eléctrica Zapala, también le compra al EPEN.

Menos generación
Con la demanda en caída por séptimo mes consecutivo, la generación necesariamente se retrajo en el país. A tal punto fue la caída que en marzo no se consumió fueloil, el combustible líquido más caro y contaminante que comenzó a utilizarse a mediados de la década pasada por falta de gas. En el caso del gasoil (igual de caro en relación con el gas escaso y casi tan contaminante), el consumo para generación de electricidad pasó de 39.000 metros cúbicos en marzo de 2017, a 22.000 el año pasado y a 7.000 el mes pasado.

El precio mayorista está desregulado; el Estado decide qué porción traslada al precio final y, por consiguiente, qué parte subsidia.
El precio mayorista creció de 1.467 pesos el MWh en marzo de 2018 a 2.723 el mes pasado. El traslado a la tarifa final fue de 971 pesos por MWh a 2.081.