La impronta con la que llegan los nuevos concejales de Bariloche

En su primer mandato tiene siete concejales más el apoyo de Pro. A partir del 10 diciembre en el bloque oficialista serán cinco, pero tiene tres bancadas unipersonales para negociar.

La elección municipal del pasado 1 de septiembre dejó un nuevo escenario político en el Concejo Municipal. El intendente Gustavo Gennuso ganó esa jornada su reelección, pero perdió capital electoral en comparación con la elección de 2015.

Esa merma de votos –significativa– cambió la relación de fuerzas en el Concejo Municipal. El oficialismo perdió la mayoría automática. También el quórum para sesionar. Dos herramientas fundamentales –sobre todo la primera– para la actividad legislativa.

Durante estos 4 años de gestión, Gennuso no tuvo inconvenientes para avanzar con las iniciativas y proyectos del Ejecutivo municipal. Tuvo 7 concejales oficialistas, con los que ganó todas las votaciones. Y si requería de una mayoría agravada contó con el apoyo del concejal del Pro Daniel González. La oposición estuvo a cargo de los 3 concejales del Frente para la Victoria.

Desde el 10 de diciembre próximo, el bloque oficialista de Juntos Somos Río Negro tendrá solo 5 concejales, el Frente de Todos, 3; y después habrá tres bloques unipersonales: Pablo Chamatrópulos, de Podemos; Ariel Cárdenas, de Bariloche por el Cambio y Gerardo del Río, de PUL. Esa relación de fuerzas obligará a todos los bloques a consensuar porque nadie tendrá mayoría.

Natalia Almonacid presidirá el Concejo Deliberante de Bariloche. Foto: Alfredo Leiva

“Pienso que tendremos un Concejo con mucho diálogo”, afirmó la concejala electa Natalia Almonacid, de Juntos, que será la presidenta del Concejo Municipal. Planteó que habrá que trabajar de manera coordinada.

Opinó que la nueva conformación “nos interpela a trabajar, dialogar y coordinar acciones”.

Almonacid sostuvo que presidir el nuevo Concejo “será todo un desafío”. Y le quitó dramatismo al hecho de haber perdido la mayoría como bloque oficialista. “No creo que sea un problema. La democracia es así”, afirmó cuando se le preguntó por la nueva relación de fuerzas, donde la oposición es mayoría.

Se pronunció partidaria del debate y de los acuerdos. Dijo que hay que exponer los temas en la mesa y discutirlos.

“Hay que sentarnos a dialogar, sabiendo que desde la oposición se puede aportar”, enfatizó. Aseguró que quiere promover el diálogo y la participación desde la Presidencia del Concejo. Su idea es desarrollar un trabajo intenso en las comisiones “y que sean abiertas a la ciudadanía”.

Uno de sus objetivos es promover la participación ciudadana. Dijo que no solo en las audiencias públicas la comunidad puede participar, sino que hay “muchos espacios”, donde pueden hacerlo.

Frente de Todos

“Me imagino un Concejo con mayor apertura que estos cuatro años, para debatir seriamente”, enfatizó la concejala electa del Frente de Todos Julieta Wallace.

Julieta Wallace, concejal electa del Frente de Todos.

Dijo que espera que se tenga en cuenta a la oposición, no como ocurrió durante esta gestión en el Concejo Municipal y en el Tribunal de Contralor, donde Wallace es vocal.

Opinó que hoy el oficialismo “se ha cerrado mucho” y aplica la mayoría que tiene en el Concejo y en el Tribunal de Contralor.

Recordó que Gennuso perdió 15 puntos en comparación con la elección de 2015. Por eso, opinó que el intendente y el oficialismo tendrán que promover el diálogo. Consideró que la postura del oficialismo de cerrarse al debate y apoyarse en la mayoría que tiene “eso empobrece a la democracia y las instituciones”.

Puso como ejemplo, el caso de la prórroga del contrato del cerro Catedral a favor de Alta Patagonia. Recordó que el oficialismo en lugar de priorizar la participación de la ciudadanía, se cerró y avanzó, sin tener en cuenta el pedido de una consulta que solicitaban 6.500 vecinos. “El oficialismo tiene que tener apertura al diálogo político”, enfatizó.

Wallace dijo que será la presidenta del bloque del Frente de Todos, que integrarán además los concejales electos Marcelo Casas y Roxana Ferreyra. Y destacó el alineamiento del bloque con el gobierno nacional desde el 10 de diciembre.

(De der. a Izq) Los concejales electos Gerardo Del Río (PUL); Roxana Ferreyra (Frente de Todos) y Gerardo Ávila (Juntos). Foto: Alfredo Leiva

Los bloques unipersonales

“El electorado marcó un nuevo mapa político más diverso”, aseveró el concejal electo por Podemos Bariloche Pablo Chamatrópulos. “Y ese nuevo mapa plantea el desafío de la necesidad de un diálogo”, remató.
Dijo que su deseo es que en el Concejo Municipal comience “una etapa de diálogo, consenso, de debate, de proponer”.

Chamatrópulos aseguró que en ese debate ya tiene definido a quién representará. “Pretendo ser la voz de esos barilochenses que me acompañaron con su voto”, consignó y mencionó que son de los barrios de la zona sur de la ciudad.

Dijo que la prioridad “es que el municipio escuche, dé respuestas concretas a problemas que no se resolvieron”. Planteó que en los barrios postergados falta infraestructura, asfalto, control de fauna, entre otros problemas.

Se pronunció a favor de consensuar con el Ejecutivo que tiene la responsabilidad de atender las demandas del ciudadano de a pie. “Tengo un enorme interés de que al Ejecutivo le vaya bien, porque somos un espacio con ambición de poder y con la expectativa de llegar al gobierno municipal”, sostuvo. Por eso, añadió, dijo que quiere aportar para que el segundo –y último gobierno de Gennuso “sea mejor que el primero”.

Opinó que el Estado municipal se ha transformado “en una máquina de impedir, en lugar de ponerlo al servicio de la gente”.

Consideró que ese descenso electoral de Gennuso en la elección pasada, “lo obliga a ser más cauteloso”. Advirtió, sin embargo, que es un mérito que haya logrado la reelección en Bariloche, donde eso no ocurre con frecuencia.

Sugirió que ahora Gennuso tiene que tener la capacidad “de escuchar otras voces porque hay un escenario político nuevo”.

Una de sus prioridades es el tema del transporte urbano de pasajeros y la falta de infraestructura.

“No es una guerra”, respondió cuando se le preguntó por la nueva conformación del Concejo. “Los proyectos se van a tratar de otra forma, porque va a haber más discusión política”, refirió.

El desembarco del PUL

Para el concejal electo de PUL, Gerardo del Río, el desafío “es tener la capacidad de consensuar todo lo que se pueda”. “La idea nuestra es hacer una oposición constructiva”, aseguró.

Dijo que trabajará “fuertemente con la CGT y llevamos como asesor a Hugo Torregrosa”.

Del Río consideró que se requiere en esta nueva etapa del Concejo “una relación seria y fluida” entre el oficialismo y los bloques de la oposición. Por eso, enfatizó que se requiere “madurez política”.

Expresó que urge trabajar en “la planificación de la ciudad como corresponde”. La prioridad para el PUL será poner en debate el cumplimiento de la ordenanza que prioriza la mano de obra local en la cobertura de puestos de trabajo. El desafío, agregó, es lograr que los trabajadores tengan acceso a un empleo formal.

Del Río analizó que se vislumbra un buen clima de trabajo a partir de las charlas que tuvieron entre concejales electos de los bloques. “Nosotros vamos a ir abiertos al diálogo, con la mejor de las predisposiciones, pero no voy a hacer un levantamanos”, aclaró. “Vamos a debatir y de esa forma avanzar con proyectos que sean lo mejor para Bariloche”.


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