«La ley de carrera sanitaria puede ser un horizonte interesante», Lammel tras las renuncias

El director del Castro Rendón señaló que no aceptará la renuncia de los médicos y confió que hay que "seguir escuchando a las personas".

Tras que en la legislatura se archivara el proyecto de ley de Carrera Sanitaria que se venía trabajando hace tiempo, el malestar en los profesionales de salud llegó a un límite. Ayer 26 jefes de servicio del hospital Castro Rendón pusieron a disposición su renuncia. El director, Adrián Lammel, adelantó que no las aceptará y remarcó que hay que seguir trabajando para superar el problema de representatividad que manifiestan los profesionales de Salud.

En declaraciones a radio Capital, el director del Castro Rendón señaló que las renuncias fueron presentadas por médicos «enojados y seguramente presionados por otros profesionales de cada uno de los servicios, de alguna manera, al cortarse tan abruptamente el diálogo que se venía dando con la ley de carrera sanitaria».

Explicó también que «ahí hay un enojo, porque en el fondo hay un problema de representatividad gremial de los profesionales que quedaron afuera de poder participar en el convenio colectivo de trabajo, en su momento, entonces hay como huecos. Y hay otras cuestiones que no se sienten comprendidos en otras situaciones gremiales».

Lammel contó que en otras provincias existen leyes de carrera sanitaria que conviven con los Convenios Colectivos de Trabajo y en ese sentido resaltó: «yo lo que creo es que es importante que se escuchen todas las partes».

«Nosotros esperábamos que en la ley de carrera sanitaria, la conducción también sea escuchada y otros sectores. Me parece que la ley de carrera sanitaria, con la participación de todos, puede ser un horizonte interesante para poder generar una mejor disponibilidad en los profesionales, ya que no estuvieron presentes en el convenio colectivo», agregó respaldando el proyecto que reclama el gremio de profesionales de la salud y que rechaza ATE.

«Ese diálogo se cortó y la preocupación es esa porque se venía trabajando desde el ministerio y desde la legislatura con los profesionales, y los legisladores cierran abruptamente este diálogo. Eso llama poderosamente la atención», confió Lammel sobre el detonante para las 26 renuncias que recibió ayer.

En ese sentido, aseguró: «mi intención no es aceptar la renuncia, porque es gente muy comprometida con la salud pública, muy comprometida con los servicios, excelentes trabajadores y es una pena que se vaya desgranando, tengo entendido que no soy el único hospital».

Sobre la salida a este conflicto que mantiene un paro en los hospitales, indicó que «hay que trabajar y seguir escuchando a las personas». Y agregó que hay una reunión entre los legisladores y el gremio Siprosapune: «hay que ver que sale de esa situación, si hay alguna cuestión de abrir el diálogo nuevamente para adentro trabajar con los jefes de servicio en esta situación».

«Hay un problema de representatividad gremial en los profesionales y eso es algo que a la larga, tarde o temprano, hay que tomarlo, y tienen que tomarlo todos, incluso los gremios. Es una cuestión que está dando vueltas hace mucho tiempo», resumió.


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