Lawfare vs coimafare

San Martín de los Andes

La argumentación que utilizó nuestra vicepresidenta para desacreditar los procesos judiciales en que se halla incursa, inconscientemente saca a la luz el verdadero concepto de lucha de ideologías imperantes en el mundo.

El término fare (guerra) es realmente el concepto de lucha política que tiene el progresismo. Para ellos, en todos los ámbitos se desarrolla una “guerra” de ideas, de posicionamientos económicos, de grupos de poder. En la guerra todo está permitido: las mentiras, las coimas, los secuestros, los lavados de dinero.

Es una guerra muy desigual, porque el resto de los contendientes no conocen que se hallan dentro de una guerra declarada y juegan inocentemente al diálogo, en un ámbito democrático y a creer que cuando dicen “han robado” implica un concepto peyorativo reconocido por toda la sociedad, porque consideran que robar está mal y creen que todos los demás contendientes políticos también lo consideran así. Pero no lo es.

En consonancia con los principios de Karl Marx respecto a la Plusvalía, define a la “coima” como una recuperación de la riqueza generada por el obrero vilmente obtenido por la patria contratista y ellos, los kirchneristas, utilizan esa recuperación de esa plusvalía para liberar al pueblo argentino oprimido.

Bajo este punto de vista es cómo se explica el objetivo del jurista Zaffaroni en cambiar el Código Penal, ya que, bajo los parámetros marxistas, la coima no debería estar tipificada como cohecho, sino como una acción meritoria de restitución y de redistribución de la riqueza hacia el trabajador. La peligrosidad de esta idea no es dimensionada aún por la sociedad y su dirigencia. El estado de derecho, las leyes y los principios dejan de tener vigencia. El que detenta el poder define lo que está bien o está mal.

Carlos Moldes
DNI 7.887.170