Loeb aprovechó la orden de su equipo para ganar

<b>Citroën decidió cuidar los lugares e Hirvonen escoltó al rey</b>

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El francés Sebastien Loeb se quedó con la victoria en el Rally de la República Argentina, tal como había sido planeado y ordenado el pasado sábado en Córdoba por el equipo Citroën, por lo que se afirma al frente del Mundial.

Después de su abandono en la primera etapa, el noruego Petter Solberg se reenganchó y dio espectáculo en las sierras cordobesas, ganando los seis tramos que se disputaron en la última etapa y terminó sexto en la general.

Loeb, ocho veces campeón, firmó su séptima victoria consecutiva en suelo cordobés, alcanzó los 70 triunfos en el WRC y la tercera en el actual Mundial.

Solberg también se benefició del abandono del español Dani Sordo, con un problema mecánico en el segundo Ford Fiesta de la escudería.

Citroën había ordenado el pasado sábado al finés Mikko Hirvonen seguir detrás de Loeb para no entorpecer una nueva victoria del francés en Argentina, una decisión de equipo que buscaba evitar luchas internas entre sus dos pilotos oficiales, que estaban entonces a más de un minuto por delante de Sordo.

Con el abandono de Sordo, el podio en Villa Carlos Caz se completó con el Ford Fiesta de otro noruego, el joven Mads Ostberg, ganador del Rally de Portugal en detrimento de Mikko Hirvonen por el uso de una pieza no acorde con el reglamento en su auto.

Después de la decisión de Yves Matton, jefe de Citroen Racing, de fijar las posiciones, Loeb e Hirvonen lograron administrar a la perfección el minuto y medio de diferencia entre ambos, manteniendo a distancia a los Ford, que en principio amenazaban con un rápido Sordo cuando promediaba la primera jornada el pasado viernes.

El tramo Matadero-Ambul, de 65 kilómetros, el más extenso de la temporada en el WRC, fue ganada por Solberg. Los dos pilotos de Citroën no tomaron riesgos y se concentraron para firmar el doblete en Argentina.


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