Luna Sujatovich presenta «Desafío guerrero», su disco debut

Heredera de un don del que no recuerda cuando se instaló en su familia, Luna Sujatovich se lanzó como solista y lo hizo con un disco al que describió, en un diálogo con RÍO NEGRO, como un abanico de colores, como un viaje de diferentes paisajes, claramente multifacético.

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“La verdad que, si bien es cierto que se trata de mi primer disco solista, con canciones propias, tengo la sensación también es cierto que llegué a él luego de muchas experiencias musicales por lo que , de alguna forma, hace que este trabajo tenga toda una historia detrás. Por eso utilicé esas palabras: desafío guerrero. Es el desafío de sacar un primer disco, pero también con mucho empuje”, confesó. A esta altura hay algo que decir que explica lo anterior: la pianista es hija del reconocido tecladista y compositor Leo Sujatovich, quien trabajó junto a Luis Alberto Spinetta; y hermana de Mateo, más conocido por liderar Conociendo Rusia.

El legado de la música está impregnado en cada uno de sus recuerdos. “Formo parte de una familia muy musical. Ya desde mi bisabuela, quien era maestra de piano, y mi abuela también. Desde la parte de mi viejo. Mi abuela Pichona era maestra de piano y fue maestra mía, de mi hermano y de mi primo. Mi hermano es Mateo Sujatovich tiene su proyecto de Conociendo Rusia y mi primo Ezequiel es director de orquesta”, sostuvo. “Mi papá, que es Leo Sujatovich, un músico de la escena local que tocó con Spinetta y también hizo muchas cosas para cine y teatro. Y mi tía Graciela, que es su hermana, es maestra de piano. Entonces, nosotros como que nos dedicamos a esto hace mucho tiempo”.
Luna hizo referencia a su pasado porque desde muy joven estuvo vinculada a la música. Sintió que este disco desde hace mucho tiempo que venía gestándolo. En 2018 compuso las canciones y para 2019 ya había sido grabado.

“Hice talleres de composición y en el que hice en 2018, sobre canciones, es que compuse la mayoría de los temas que están en el disco. Para mí fue muy importante esto de generar una continuidad y me pareció como que tener un taller donde llevar canciones, llevar ideas a un grupo de personas, que puede llegar a ser tus amigos también, y además que Edgardo Cardozo (guitarrista, cantante y compositor a cargo del taller), es un tremendo músico y compositor, nos supo transmitir cosas muy interesantes a la hora de componer y la verdad que fue como una especie de semillero de ideas”, recalcó.

Para cuando la cantante pensaba lanzar su material discográfico sucedió lo inesperado: la pandemia. “El disco lo grabamos en 2019. No salió antes porque en 2020, con la pandemia, los tiempos se dilataron mucho. A mitad del año pasado me puse a pensar en la tapa del disco. A principio de este año hicimos el videoclip de “En la mañana”. Que fue la primera canción que salió, entonces con el videoclip listo ahí era como que daba para sacarlo”, aseguró.

Cuando tiene que describir a cada canción, cómo se relacionan entre sí lo hace con una suerte de analogía diciendo que al escuchar el disco se puede disfrutar como un viaje, en el que vamos disfrutando de diferentes lugares.
“Cada canción es como una postal distinta, van como rondando distintos temas, y también distintos estilos musicales. El disco es como un abanico de colores. Y también eso fue un poco el desafío. Nos terminamos dando cuenta con Nicolás Btesh, el productor, que ese era nuestro desafío y había que darle bola a eso. Como que, claramente, cada canción iba a tener como un mundo particular, como un viaje con distintos paisajes”, explicó.

También aclaró que cada tema tiene una impronta singular y resaltó que hay muchos sonidos y estilos distintos. “Hay diferentes sonidos: desde el folclore argentino, como el candombe, también hay algunas cosas yéndose hacia el rock y jazz, como algunas influencias medio del flamenco. O sea, hay la verdad que muchas cosas en el disco. Desafío Guerrero son ocho canciones”, indicó.
Luna Sujatovich contó que uno de los mayores retos fue ser fiel a su estilo, a sus ganas de sacar un disco diferente. “Creo que el desafío de este disco fue respetar esta necesidad de la multiplicidad y que por suerte conté con un grupo de personas muy grosas. Como que no se encasillaron y siempre tuvieron como la puertita abierta, ese aire que permite salirse un poco de la regla. Los que me acompañaron en este viaje fueron Juan Giménez Kuj, en bajo, Tomás Fraga, en guitarra, Facundo Guevara, en percusión y Guille Salort en batería”, finalizó.