Niegan salidas para estudiar a Safita, el femicida condenado a perpetua

Tiene un informe a favor del Gabinete Técnico Criminológico. Pero la jueza de Ejecución dijo que no se evaluó la posibilidad material de las salidas bajo custodia policial.

A Mario Oscar Safita no se le movió un músculo de la cara cuando su defensor pidió que le autorizaran salidas para estudiar, cuatro veces por semana, tres horas cada vez. Tampoco cuando las integrantes del Gabinete Técnico Criminológico dictaminaron que su riesgo es “medio”, pero así y todo se declararon a favor de las salidas “bajo custodia policial”. Tampoco hizo el menor gesto cuando el fiscal expresó su oposición porque “el Estado no le puede poner un remís para que vaya 12 veces por mes a estudiar”. Y sólo suspiró de manera apenas perceptible cuando la jueza de Ejecución le rechazó el pedido. Se puso de pie con gesto mecánico y, como mandan las reglas, puso las manos a la espalda para que le coloquen las esposas y se retiró de la audiencia sin decir palabra.

Safita (55) está condenado a perpetua por femicida. Mató a su esposa y a uno de sus hijos, e hirió de gravedad al otro con un cuchillo de grandes dimensiones que había comprado horas antes.

Fue en Senillosa, el 22 de noviembre de 2003. En ese entonces la figura del femicidio no estaba en el Código Penal, y la sentencia fue por homicidio agravado.

Ahora está en pareja nuevamente, según se dijo este lunes en la audiencia.

Una hermana de su ex esposa asesinada fue notificada de las intenciones de Safita de salir, pero no se presentó a la audiencia a manifestar su posición.

En los 16 años que lleva preso, Safita hizo todos los cursos que pudo intramuros y recibió una rebaja de pena de 20 meses, el máximo al que puede aspirar por ley.

En la audiencia de este lunes, dos integrantes del gabinete Técnico Criminológico que lo entrevistaron -y que se preocuparon por aclarar que además, habían leído todo su legajo- dieron el visto bueno para sus salidas.

Una de ellas, psicóloga, informó que Safita concurre habitualmente a un centro de salud donde hace terapia y calificó su trabajo de “reflexivo y comprometido”.

No aclaró si está arrepentido de sus crímenes, y tampoco si entre tantos cursos de capacitación hizo alguno de perspectiva de género. En el juicio oral, cuando lo condenaron, demostró desprecio por su pareja asesinada.

Así las cosas, el eje del debate en la audiencia de ayer discurrió por otros carriles. La psicóloga calificó el riesgo criminológico de Safita de “medio” y sugirió que sus salidas sean acompañadas por un policía.

El fiscal Andrés Carrea le preguntó si alguna vez había autorizado 16 salidas mensuales por estudio para un solo interno, y la profesional admitió que nunca. También quiso saber si había considerado el costo que eso tendría para el Estado.

Luego, en su alegato de oposición, Carrea manifestó que el Estado no podía hacerse cargo y aclaró que “esto no implica que los derechos de Safita sean conculcados. Acompañamos todo lo que quiera hacer dentro de la unidad, pero afuera es materialmente imposible”.

El defensor Juan Galarraga afirmó que “el Estado tiene la obligación de contar con recursos para la reinserción”.

«Si presentamos un amparo, cualquier juez le haría lugar», afirmó.

Añadió que el centro educativo “queda cerca de la Unidad de Detención, lo podrían trasladar caminando”. Los guardias de la sala, que pertenecen al servicio penitenciario, cruzaron una mirada significativa entre ellos.

Finalmente habló la jueza de Ejecución, Raquel Gass, quien rechazó las salidas por estudio.

Dijo que el informe del Gabinete Técnico Criminológico “me llama mucho la atención” porque no evaluó la posibilidad material de las salidas y no fundamentó correctamente la necesidad de una custodia policial.

También señaló que no autoriza esa clase de salidas porque no sirven para evaluar a los detenidos.

Remarcó además que la defensa no citó al jefe de traslado de las unidades de detención para conocer la disponibilidad de móviles, ya que en la actualidad hay uno solo. Y descartó de plano el traslado a pie, ya que la ART no cubre a los penitenciarios.

Por último, Gass le aconsejó a la defensa que consiga un tutor para las salidas de Safita, por ejemplo la nueva pareja, y pida otra audiencia.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios