Operativo solidario: escuelas y técnicos de Santa Cruz unidos para producir insumos sanitarios

Escuelas industriales, junto a técnicos independientes y voluntarios organizaron un inusual operativo solidario en toda la provincia de Santa Cruz para confeccionan mascarillas y otros dispositivos para proteger al personal sanitario local que trabaja en la emergencia por coronavirus.

Articulados por los ministerios de Salud y Seguridad, instituciones educativas industriales y centros educativos de formación y actualización profesional (CEFyAP), junto a técnicos independientes, confeccionan desde hace unos días mascarillas de protección para quienes trabajan en los hospitales.

El Rotary Internacional Río Gallegos también desde la semana anterior confecciona barbijos, botas y camisolines descartables para centros de salud, y una escuela de robótica local desarrolló una aplicación para agilizar los trámites de control de circulación en el marco del aislamiento social preventivo y obligatorio.

«Desde el sistema educativo por su estructura, con unas 50 impresoras 3D distribuidas en toda la provincia, y con técnicos independientes ante la necesidad, confeccionamos un diseño genérico adecuado para hospitales, que es una visera con un elástico impresos que ajustan una mascarilla«, informó a Télam Rodrigo Gojan, director provincial de Educación Técnica.

Gojan dijo que con el hospital regional de Río Gallegos, ciudad en la que viven 118.000 personas, se dispuso una articulación entre el Laboratorio 3D de esa dependencia que se dedica a la confección de biomodelos, y la de los CEFyAR N° 1 y 4 de Educación, para esta producción especial.

En la ciudad de 28 de Noviembre, en el sudoeste de la provincia y con una población de unos 9.665 ciudadanos, la articulación es con la división Bomberos que tiene un especialista, que capacitó personal para esta producción.

Para la fabricación de las mascarillas necesarias, se pueden reutilizar distintos materiales como placas radiográficas o botellas de plástico, aunque en la localidad de Puerto Santa Cruz son confeccionadas con acetato proporcionado por el municipio en el que viven 5670 personas.

Mario Ávila, director del CEFyAR N°6 de esa ciudad costera ubicada a 250 kilómetros de la capital, coordina el trabajo voluntario de docentes a cargo de cinco equipos de ambas instituciones, organizados por turnos, «para ajustarnos al aislamiento», dijo.

«Desde el martes pasado, trabajamos a partir de un pedido del hospital de 20 mascarillas de protección para usar en la zona roja que acondicionaron para atender eventuales contagiados. Además, enviamos al hogar de ancianos y continuamos con una producción cuyo destino determinará b», dijo el directivo.

Matías Sansone, de Rotary Club Río Gallegos, por su actividad en el mercado de prendas masculinas, propuso a las autoridades confeccionar barbijos, a lo que se sumaron pedidos de botas y camisolines descartables para los centros de salud. La primera tanda ya tiene unas 1000 piezas que la institución tiene listas para su distribución.

«Gestionamos con recurso del Club y de los socios la compra de friselina y enviamos por cadena de whastapp el instructivo y medidas a los socios que participan en sus casas de esta iniciativa», dijo a Télam el rotario.

Mauro Ziehlke, de la escuela de robótica Zima Tech, por su parte, diseñó una aplicación para agilizar los controles de circulación y dijo que varios efectivos policiales de la provincia se interesaron en su utilización, como también en la ciudad cordobesa El Arañado, donde harán una prueba con el soft.

Agencia Télam.