Tensión en Viedma por el crimen de Alarcón

VIEDMA (AV).- Quince ruedas de reconocimiento fueron realizadas ayer en Tribunales, en el marco de la investigación del homicidio de Daniel Alarcón, de 18 años. Los trámites judiciales generaron una importante cantidad de público y una gran tensión, teniendo en cuenta que allí se encontraban familiares y amigos de la víctima y también de los seis detenidos que tiene la causa. La situación demandó un visible refuerzo de la custodia policial en el edificio, donde se pudo ver, además, a un joven con marcas de tremendos golpes en el rostro, totalmente hinchado y morado, a medio cubrir por un pañuelo que ocultaba más huellas de violencia. El juez penal de Viedma Guillermo Bustamante citó para hoy a declarar como imputados a los seis detenidos, cuyas edades varían entre los 18 y 24 años. La mayoría de ellos reside en el barrio Parque Independencia, ubicado en inmediaciones a la rotonda Islas Malvinas, donde fue encontrada la víctima que falleció mientras era trasladada al hospital Zatti. Una de las calles que desemboca en esa rotonda conduce tanto al barrio Independencia como al Lavalle. La ambulancia del nosocomio fue también requerida ayer desde el edificio de Tribunales tras la descompensación que sufrió una mujer que sería familiar de uno de los detenidos y también se la necesitó en el sepelio del jovencito, para atender a algunas personas que acompañaron esa ceremonia de despedida. Tenso era el ambiente que se advertía ayer en el juzgado penal a cargo de Bustamante, donde se mezclaban, de un lado, el dolor por la pérdida irreparable y, del otro, la angustia por la detención de los seis jóvenes presuntamente involucrados en un hecho gravísimo. Según trascendió, dos de los detenidos serían hermano e hijo de un policía. Todos tendrán hoy la oportunidad de defenderse en las indagatorias. No obstante ayer el juez informó a varios padres sobre la decisión de que los seis permanezcan privados de la libertad en el marco de la investigación de la causa caratulada como “homicidio”. De acuerdo a lo que se supo el domingo, Alarcón y un grupo de amigos habrían concurrido a un local bailable de la avenida Caseros de esta capital ubicado a unas cuadras de la rotonda donde cayó herido el desafortunado joven. Pasadas las cinco de la mañana se habrían retirado, tambaleantes por la ingesta de alcohol. En ese momento, y en la vereda de enfrente, se encontraba otro grupo de jóvenes quienes a los pocos metros habrían golpeado brutalmente a los otros con las reacciones y fuerzas disminuidas por el efecto del alcohol. Piedras, patadas, golpes de puño por todo el cuerpo y un ladrillazo en el cráneo habrían generado un daño irreversible en Alarcón, quien habría muerto asfixiado por su propia sangre. Una cámara ubicada frente al local bailable habría registrado algunos de los movimientos de los dos grupos de jóvenes.