Preocupa la suba de casos en Neuquén, pero descartan toque de queda sanitario
La ministra de Salud, Andrea Peve, vinculó el aumento de contagios al relajamiento de los cuidados y a las reuniones sociales. Hoy habrá una reunión federal para analizar la situación sanitaria en todo el país.
En los últimos días se observan más personas que esperan ser testeadas en el monumento. Foto Florencia Salto.
El alivio que había llegado para el sistema sanitario de Neuquén tras un octubre dramático por la suba de casos de coronavirus parece haber concluido. El número de contagios activos se duplicó en las últimas dos semanas y el gobierno provincial admitió que hay un “relajamiento” sobre las medidas de cuidado, particularmente asociado al período de las Fiestas.
“Ha sido un año duro y necesitamos que este verano no sea un caos, sino un verano responsable”, pidió ayer la ministra de Salud, Andrea Peve, quien aseguró que la situación se está monitoreando con preocupación desde “hace varias semanas” y que no está vinculada tanto al turismo sino a las reuniones sociales y familiares.
La ocupación de camas de terapia intensiva alcanzó este fin de semana el 95%, aunque desde el Poder Ejecutivo aseguraron que aún hay margen para ampliar las plazas disponibles. “No son las camas de octubre”, aseguraron respecto del número sobre el cual se calcula el porcentaje: algunas se estaban ocupando con cirugías programadas (ahora nuevamente suspendidas), otras se habían habilitado con la llegada de médicos itinerantes que ya no están en la provincia pero que podrían volver.
De todas formas, el gobierno admitió que el número es alto y que deben volver a respetarse las normas de distanciamiento, aunque sin la amenaza de una vuelta a las restricciones. Hoy habrá una reunión del Consejo Federal de Salud (Cofesa) en la que cada ministro llevará un resumen de la situación epidemiológica de su provincia para analizar medidas.
Peve dijo que la posibilidad de un “toque de queda sanitario”, como se viene mencionando en los últimos días, u otro tipo de medidas, “se evaluará a nivel nacional”. El gobernador Omar Gutiérrez añadió que se dialogará en el contexto del “gabinete federal” que funciona desde el inicio de la pandemia, aunque otras fuentes cercanas al gobierno afirmaron ayer que no era una posibilidad solicitar una restricción a la circulación en este momento.
En Neuquén todas las actividades comerciales y recreativas están habilitadas, a excepción de eventos masivos y los cines. Los horarios de circulación en la mayoría de las ciudades son hasta las 3 de la madrugada, aunque con cierta tolerancia.
El gobernador reclamó que a mayor apertura, mayores deben ser los cuidados y analizó que el alivio que se vio en la provincia durante buena parte de noviembre y principios de diciembre fue “una curva que se prolongó y tuvo un descanso a mitad de la escalera”. Recordó que nunca se logró bajar a menos de 80 casos diarios y, en cambio, terminó quedando un promedio alto de 250 contagios por día. También insistió en que la llegada de la vacuna “es el principio del fin, no el fin”.
“Falta muchísimo menos y no podemos despilfarrar el esfuerzo que hemos realizado”, planteó.
La provincia inició su plan de vacunación, al igual que el resto del país, el martes pasado con la llegada de 1.800 dosis que finalmente alcanzaron para 1.813 personas. Para esta semana se espera una tanda similar que servirá para avanzar con otros trabajadores de salud, pues aún no llegará a la población general.
La nueva aceleración de contagios de coronavirus en Neuquén comenzó en diciembre, con picos que sobrepasaron los 500 casos diarios y volvieron a meter presión sobre las unidades de terapia intensiva de la provincia.
Hace 15 días atrás, los casos de covid-19 activos en todo el territorio eran 2.264 y, para el domingo, ya prácticamente se habían duplicado: pasaron a 4.379.
Si el dato se busca hace un mes atrás, justo en el inicio de diciembre y la temporada turística, el número era de 1.897 casos activos.
La ocupación de camas de terapia intensiva había tocado, también en ese momento, uno de sus puntos más bajos desde el pico de la pandemia con un 67%. El porcentaje creció al 95% un mes después, aunque desde el gobierno aclararon que todavía hay margen para ampliar la capacidad.
Si bien la suba de casos coincide con el regreso del turismo, el gobernador Omar Gutiérrez evaluó ayer que cargar las culpas hacia ese sector es “faltar a la verdad”, pues todas las actividades comerciales y recreativas están abiertas.
“Eso genera un mayor nivel de circulación y, a mayor nivel de circulación, debe haber mayor apego a los nuevos hábitos, usos y costumbres”, planteó. “Si tenemos un sentimiento de hartazgo después de muchas semanas de cuarentena, quiero transmitirles que falta muchísimo menos”, sostuvo sobre el inicio de la vacunación.
Las ciudades con mayor cantidad de casos activos son Neuquén capital, San Martín de los Andes, Rincón de los Sauces y Junín de los Andes. Las tres últimas habían sufrido un impacto moderado durante la primera ola cuando la concentración de contagios ocurría, principalmente, en la zona metropolitana con Plottier y Centenario.
En la actualidad solo 10 localidades de las 57 de la provincia no han registrado casos durante esta pandemia: Coyuco-Cochico, Octavio Pico, Pilo Lil, Quili Malal, Ramón Castro, Varvarco Invernada-Vieja, Villa Curi Leuvu, Villa del Nahueve, Guañacos, Los Chihuidos.
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