Reaccionemos antes de que sea tarde
La Argentina atraviesa una severísima crisis, de las más diversas clases (institucional, política, económica, sanitaria, judicial, educativa, previsional, etc.), todas con un denominador común: la ética y la moral.
Esto implica que de una u otra manera nuestros representantes están teñidos de una ética y moral cuestionables. Esto aplica a jueces, políticos, empresarios, dirigentes gremiales, etc.
Vivimos en un país de 44/45 millones de personas que -por su extensión territorial- está casi vacío, que cuenta con el beneficio de tener “casi todo” (agro, ganadería, energía, turismo, etc.). Antes también teníamos industria y educación, pero eso ya lo perdimos hace tiempo. Nuestros jóvenes en su mayoría no estudian y el nivel intelectual es pésimo.
Tenemos una tremenda deuda financiera a nivel país, prácticamente impagable, incluso luego del último acuerdo con bonistas externos.
Últimamente muchos argentinos salimos a la calle a manifestarnos, sin que el Poder Ejecutivo tuviera alguna reacción -excepto una honrosa excepción (Vicentin)-. El desplazamiento de jueces que intervinieron en causas vinculadas a la vicepresidenta grafican la situación, toma de tierras privadas sin acción del Estado, jueces que avalan a los delincuentes en lugar de a los policías.
Estamos a poco de convertirnos en una segunda Venezuela… Tendremos que hacer algo más -no sé bien qué-, porque en algún momento no muy lejano a algún extranjero iluminado (¿China? ¿EE. UU.?) se le va a ocurrir que un país con tanta riqueza es apetecible y decida “comprarnos”. Por eso digo a los argentinos que, como el sueño de nuestros patriotas (San Martín, Belgrano), hagamos algo antes de que sea demasiado tarde.
Daniel E. Gutiérrez
DNI 13.655.379
Neuquén
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