La misteriosa tragedia que rodeó la vida de Olivia Newton-John

La muerte de la protagonista de "Grease" trajo consigo la historia de Patrick McDermott, la pareja de la artista que desapareció misteriosamente y de la que nunca supo nada más.

Nadie duda del exitoso recorrido de Olivia Newton-John en su carrera como actriz y cantante, donde se destacó. Sin embargo, una extraña tragedia opacó su vida y la rodeó de misterio.

Es que la artista compartió nueve años de pareja con Patrick McDermott, pero ese vínculo se quebró tras la extraña desaparición física del hombre. La historia indica que Olivia quedó desbastada entonces, tras no poder dar con el paradero del camarógrafo.

Según la reconstrucción de los hechos, en 2005, McDermott salió en una expedición junto a otras 20 personas y jamás regresó. Tres años después de búsqueda, personal policial dio al hombre por muerto.

En ese contexto, destruida por ese misterioso abandono, Olivia decidió dar otro rumbo a su vida y se casó tiempo después con el gurú de salud John Easterling, con quien permaneció comprometida hasta sus últimos días. De hecho, fue el propio Easterling quien dio la noticia de su deceso este lunes.

Se sabe que McDermott, al momento de su desaparición, cargaba con muchas deudas y problemas legales derivados de no asistir a su hijo económicamente, por lo que su desaparición generó mucha controversia.

A pesar de que su vida tomó otro rumbo, Newton-John siguió con la incógnita sobre lo que había pasado con su expareja. Por eso, creó una página web para quienes pudieran aportar información sobre el paradero del actor.

Los intentos de la actriz fueron en vano: durante más de once años no se supo del destino de McDermott, a pesar de los numerosos intentos por dar con él.

Pero un día, el milagro sucedió… o no tanto. Una agencia de detectives privados, contratada por el programa «Dateline» de NBC, encontró a McDermott con vida.

De hecho, uno de los investigadores afirmó en 2009 haber recibido un fax firmado por el mismísimo trabajador de los medios, en el que señalaba que se encontraba vivo y exigiendo que se le dejara en paz.

Finalmente, y a pesar de sospecharse de que se podía tratar de un fraude, McDermott fue localizado en la isla de Sayulita, México, donde vivía con una nueva pareja.

Newton-John la pasó mal en la búsqueda y, más tarde, con la certeza de saber que lo de su expareja había sido, al menos, un engaño. «Ella no podía creer que estuviera vivo después de tanto tiempo», confiaron sus amigas tiempo después.


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