Rocío ganó el oro en los Juegos Evita y va por más

Cada vez que entra a la pista de atletismo, Rocío Reyes Oyarzún se transforma. Esa chica humilde y respetuosa, como la describe su entrenador Daniel Escobar, se convierte en una flecha que no detiene ni el viento.

Rocío dio otra muestra de carácter en los Juegos Nacionales Evita, que se disputaron la semana pasada en Mar del Plata.

La chica barilochense logró el primer puesto en la prueba de 800 metros para atletas de 17 años, con un tiempo de 2 minutos y 19 segundos. Rocío tiene 15 años.

Contó que el lunes de la semana pasada había corrido una de las series clasificatorias para la final de los 800 metros. En esa prueba, cruzó la meta en el segundo puesto, con un tiempo de 2 minutos y 26 segundos, y aseguró un lugar en la final, que se disputó el miércoles.

“Salí con las punteras a tirar al grupo”, explicó. Rocío siempre guarda energías para el remate. Y esa reserva le permitió superar a sus competidoras en la recta final de la prueba y conseguir el campeonato nacional. Su esfuerzo le permitió sumar una medalla de oro al equipo rionegrino.

Hubo poco tiempo para el festejo. El jueves, regresó a la pista para luchar por acceder a la final de la prueba de 2.000 metros. Hizo la prueba en 7 minutos y 3 segundos.

“Hacía calor y había mucho viento en contra”, recordó la joven corredora. Pero el viento no es problema, porque está acostumbrada a entrenar con el viento patagónico como compañero. Alcanzó el tercer puesto en la serie y pasó a la final del viernes.

Rocío comentó que en el inicio de la prueba había optado por ubicarse en el pelotón de las punteras. “Había muchas chicas y nos chocábamos o nos pisábamos, así que al principio fue una carrera un poco incómoda”, explicó.

Hasta que la atleta Anastasia Kirillov comenzó a tirar y se alejó del grupo para liderar en solitario la carrera. Rocío contó que en ese momento decidió permanecer en el grupo de las punteras. En la última vuelta, salió a rematar a paso firme y veloz.

Mencionó que Kirillov le había sacado alrededor de 50 metros de distancia. Con mucho esfuerzo, achicó la distancia varios metros, lo que le permitió lograr el subcampeonato nacional. Quedó a 3 segundos de la vencedora.

Rocío marcó un tiempo de 6 minutos y 43 segundos, 20 segundos menos de lo que había alcanzado en la clasificación. Para Kirillov era su última competencia en los Evita porque ya tiene 17 años. Rocío tendrá posiblemente revancha el año próximo.

“La experiencia como siempre fue muy linda y los profesores se preocuparon por mi”, sostuvo la chica, que integró la selección de Río Negro.

Dijo que se preparó mucho para los Juegos Evita, con entrenamiento intenso de lunes a sábados en el velódromo municipal. Rocío fue abanderada del equipo rionegrino de atletismo que compitió en los Juegos Evita.

La joven explicó que siempre le llamó la atención el atletismo, Tal vez haya alguna influencia de su abuelo, Moisés, que corría.

Escobar entrena, junto con Rosana Martínez, a Rocío. Destacó que en la edición del año pasado de los Juegos Evita, Rocío había ganado las pruebas de 800 y 2.000 metros en la categoría de 14 años.

Valoró el esfuerzo que hace todo el tiempo Andrea Oyarzún, la madre de Rocío, “porque su ayuda es muy importante para los viajes” del cuerpo técnico con la joven.

Escobar dijo que el próximo desafío de Rocío es el Campeonato Nacional U-16, que se disputará en Córdoba desde el 1 hasta el 3 de noviembre. Y agradeció al subsecretario de Deporte Federado del Gobierno provincial, Juan Pablo Muena, “porque nos donó los pasajes”.

Rocío dijo que resolvió con sus entrenadores que correrá sólo la prueba de 2.400 metros, en Córdoba, con el desafío de lograr el récord nacional. Su mejor marca es de 8 minutos y 24 segundos y el récord nacional es de 8 minutos y 20 segundos. Son apenas 4 segundos que la separan de alcanzar otra vez la gloria.