8M: Unas 2.000 mujeres recuperaron las calles en Bariloche
La marcha comenzó en la zona del Alto de la ciudad y finalizó casi dos horas después en el Centro Cívico. Ni el frío ni la amenaza de lluvia detuvo el avance de la columna. Las consignas contra el patriarcado se multiplicaron.
Miles de mujeres salieron a las calles de Bariloche a exigir el cumplimiento de sus derechos el año pasado. Foto: archivo
Ni el intenso frío ni el viento detuvo la movilización que alrededor de 2.000 mujeres protagonizaron esta tarde de martes en Bariloche. Las manifestantes recuperaron las calles para conmemorar el Día Internacional de la Mujer Trabajadora y demandar el cumplimiento de sus derechos a los gobiernos nacional, provincial y municipal.
Arropadas con ropa de abrigo, termos con café y mate, las mujeres salieron a marchar para defender el terreno ganado en años de luchas. La columna partió alrededor de las 17 desde Onelli y Sobral, en la parte del Alto de Bariloche.
Al frente se ubicaron mujeres del colectivo “Ni Una Menos Furilofche” con una bandera. El grupo que comenzó la marcha en dirección al centro de esta ciudad no era numeroso en las primeras cuadras. Pero a medida que la columna avanzó se fueron sumando mujeres y algunos varones que acompañaron la movilización que no la frenó ni la llovizna que caía de a ratos.
Cuando las manifestantes llegaron a la calle Moreno la columna ya era multitudinaria. Por eso, las manifestantes se hicieron sentir con fuerza cuando entraron a la calle Mitre. “¡Se va a acabar, se va a acabar esa costumbre de matar!”, gritaron cientos de mujeres.
“No somos histéricas, somos históricas”, decía el mensaje escrito en un cartel que una niña portaba. Las consignas en carteles y banderas se multiplicaban. También, los mensajes contra el patriarcado. Otra nena caminaba de la mano de su madre con un cartel que decía: “quiero vivir sin miedo”.
Personal de Tránsito de la Municipalidad corría presuroso para cortar las calles y coordinar el tránsito vehicular por ese sector del centro de la ciudad y calmar a conductores impacientes que hacían sonar sus bocinas descontentos por la espera.
Cuando las más de 2.000 personas se aproximaron al Centro Cívico, un solo grito retumbó en las arcadas de piedra: “Ni una menos, vivas nos queremos!” Mientras, las personas que tocaban los tambores e instrumentos de percusión marcaban el ritmo que le puso calor a una tarde casi de invierno. El cielo estaba gris y la amenaza de lluvia era inminente.
En pocos minutos, las mujeres ganaron gran parte de la plaza del Centro Cívico. Los pañuelos verdes y violetas se multiplicaron. “La deuda es con nosotros y nosotres”, afirmaron como para que escuchen los gobernantes.
Entre las manifestantes había banderas de sindicatos, de organizaciones sociales, políticas y de varios colectivos que integran el movimiento feminista en Bariloche. También, las mujeres mapuches participaron de la marcha.
A los pocos minutos que finalizó la marcha empezó la desconcentración, aunque la militancia feminista se quedó en la plaza cantando y gritando consignas en una jornada de lucha. Mientras, algunos turistas desprevenidos y desprevenidas se tomaban fotografías en el emblemático Centro Cívico copado por las mujeres.
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