Elección de la reina de la Nieve: «Se puede disfrutar de una fiesta popular, dejando de lado la violencia simbólica»

La polémica se generó luego de que el Municipio de Bariloche confirmó que este año iba a reflotar el certamen. Hace más de cinco años se había dejado de lado el concurso por entender que cosificaba a la mujer y reproducía estereotipos de belleza hegemónica. La Multisectorial de Mujeres y Disidencias pidió al intendente Walter Cortes y al secretario de Turismo, Sergio Herrero, que den marcha atrás con la decisión. Vos qué opinás al respecto.

«Volver a esta lógica arcaica en un contexto nacional de retroceso en los derechos de las mujeres y las diversidades, en el que vuelven los discursos conservadores, no es casual«. La Multisectorial de Mujeres y Disidencias de Bariloche, junto a sindicatos y organizaciones sociales y políticas, entregó una nota en el Concejo Municipal, con copia al intendente Walter Cortes y el secretario de Turismo, Sergio Herrero, para pedir que se de marcha atrás con la elección de la Reina durante la Fiesta Nacional de la Nieve que se dejó atrás en 2016.

Desde las organizaciones insistieron en no estar en desacuerdo con la realización de la fiesta popular de Bariloche, a la que definieron como «un evento histórico en la ciudad«. Pero resaltaron en la necesidad de «no retroceder en las conquistas en los derechos como mujeres y en los debates en la comunidad».

«Entendemos que las elecciones de las reinas son concursos que promueven estereotipos de belleza hegemónicos dominantes que, muchas veces, estimulan o fomentan en las niñas y mujeres querer tener un cuerpo único, impuesto y que no existe. Es violencia simbólica«, destacó Belén Etcheverry, integrante de la Multisectorial, un espacio que nació tras el 36 Encuentro Pluricultural de Mujers, Lesbianas, Travestis, Trans, Bisexuales e Intersexuales que se llevó a cabo en Bariloche.

«La propuesta no es aislada, se da en un contexto donde vienen proliferando discursos antifeministas y de odio contra todas las reivindicaciones que el movimiento de mujeres y disidencias viene peleando hace tantos años».

Belén Spinetta, Multisectorial de Mujeres y Disidencias en Bariloche.

Recordó que los reglamentos de ediciones anteriores establecían que las participantes de los concursos no podían estar casadas e incluso, debían tener determinada estatura.

Allá por 2014, un movimiento feminista a nivel nacional puso en debate en Bahía Blanca que se trataba de violencia simbólica contra las mujeres, promovida por los Estados municipales, provinciales, nacionales. Y al día de hoy, alrededor de 70 ciudades en el país suprimieron esos concursos de belleza. En cambio, empezaron a elegirse representantes culturales y del ámbito deportivo.

«Acordamos con ese estilo, pero no con una elección de la reina que promueve la violencia simbólica. Si hablamos de femicidios, matan a una mujer en Argentina cada 30 horas por ser mujer. El femicidio es la expresión máxima o la punta del iceberg en cuya base hay pequeñas violencias, micro violencias. Violencias como hacer desfilar a las niñas», señaló Etcheverry.

En la nota presentada mencionan que unas 49 mujeres fueron asesinadas en los primeros meses del 2024. También plantearon que Argentina es uno de los países con una alta tasa de trastornos de alimentación en mujeres de 13 a 25 años.

«Hay que decir también que el sistema de salud no está presente para hacer frente a estas cuestiones de bulimia y anorexia que generan este tipo de elecciones. Hoy, la ausencia de salud mental es total. Creo que avanzar con esto significa disponer de cuestiones que, hoy, económica y financieramente no estamos en condiciones de afrontar», indicó Valeria Geldres.

La nota cita uno de los artículos de la ley nacional 26.485 que previene y sanciona la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que se desarrollan sus relaciones interpersonales. Consideraron que la reproducción de estas prácticas se traduce en una mayor violencia hacia las mujeres y niñas que repercute directamente en sus vidas.

«Desde nuestros espacios creemos que se pueden realizar y disfrutar estos festejos, dejando de lado las prácticas arcaicas y la violencia. Instamos a la reflexión y compromiso por parte del Ejecutivo«, plantea la nota.

No queremos retroceder en ninguno de nuestros derechos que hemos conquistado en la calle, en luchas, exponiéndonos de todas maneras. Nuestros cuerpos son los que más sufren este tipo de cuestiones»,

Valeria Geldres, Multisectorial de Mujeres y Disidencias de Bariloche.

Ante los constantes reclamos por la decisión de volver a instalar el concurso de la reina, el secretario de Turismo de Bariloche argumentó que las postulantes no desfilarían en malla, no se exhibirán cuerpos y que se «elegiría también al rey para equiparar«.

«Nos parece que es simplemente duplicar el estereotipo, reproducir prácticas arcaicas de modelos que nada tienen que ver con nuestro andar cotidiano, con nuestro pueblo», manifestaron desde la Multisectorial y concluyeron: «Si una empresa pretende hacer un concurso de belleza, no nos metemos. Lo que no queremos es que el estado, del que formamos parte, promueva estos concursos de belleza que fomentan la violencia contra las mujeres«.


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