Taxista se defendió de acusaciones

CIPOLLETTI (AC).- El taxista que fue denunciado públicamente el miércoles reconoció que iba con un arma dentro del auto pero se justificó: aclaró que se trataba de un “flexible”, una especie de cachiporra de fabricación casera. El hombre dijo que la noche de los hechos volvía de Allen hacia Neuquén y que en la discoteca de Cipolletti un grupo de chicos “que estaban borrachos” le pateó la puerta. “Armas de fuego no tengo; lo más que pude haber llegado a tener esa noche es un flexible, es un aparato que se estira y se hace como un palo… Lo tenía en el asiento, lo estaba acomodando, deben haber pensado que era un arma de fuego, como se empujaban unos a otros”, dijo el chofer en declaraciones a LU19. La polémica se generó cuando una mujer denunció en la radio que su hijo había intentado abordar un taxi a la salida del boliche y que el chofer tenía un arma entre sus manos. La madre aseguró que varios amigos de su hijo y un grupo de chicas habían visto al taxista armado. A pesar de tener los datos de la patente, no radicó ninguna denuncia policial por el hecho. Ayer, el taxista de apellido Pulgar aseguró a través del medio radial que se trató de “una confusión” y que los chicos “estaban borrachos y peleándose por subir al taxi”.


CIPOLLETTI (AC).- El taxista que fue denunciado públicamente el miércoles reconoció que iba con un arma dentro del auto pero se justificó: aclaró que se trataba de un “flexible”, una especie de cachiporra de fabricación casera. El hombre dijo que la noche de los hechos volvía de Allen hacia Neuquén y que en la discoteca de Cipolletti un grupo de chicos “que estaban borrachos” le pateó la puerta. “Armas de fuego no tengo; lo más que pude haber llegado a tener esa noche es un flexible, es un aparato que se estira y se hace como un palo… Lo tenía en el asiento, lo estaba acomodando, deben haber pensado que era un arma de fuego, como se empujaban unos a otros”, dijo el chofer en declaraciones a LU19. La polémica se generó cuando una mujer denunció en la radio que su hijo había intentado abordar un taxi a la salida del boliche y que el chofer tenía un arma entre sus manos. La madre aseguró que varios amigos de su hijo y un grupo de chicas habían visto al taxista armado. A pesar de tener los datos de la patente, no radicó ninguna denuncia policial por el hecho. Ayer, el taxista de apellido Pulgar aseguró a través del medio radial que se trató de “una confusión” y que los chicos “estaban borrachos y peleándose por subir al taxi”.

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