Tras varios meses de conflicto y con ayuda, Mi Bus pagó los sueldos
El lunes se depositaros los haberes de los choferes, después de cuatro meses en los que hubo demoras, pago en cuotas y mediaciones laborales.
Entre diciembre y marzo, la empresa no pagó en tiempo y forma. Archivo
Después de cuatro meses de reiterados reclamos, demoras, pagos en cuotas y mediaciones laborales, los choferes de la empresa Mi Bus esta vez percibieron sus salarios en término con la ayuda de una nueva inyección de fondos a la empresa por parte del municipio.
El gobierno de Gustavo Gennuso en los últimos dos meses repitió la estrategia y aportó como subsidios 6 millones de pesos en marzo y una cifra similar este mes, para ayudar a Mi Bus a pagar los salarios. En febrero el aporte había sido de 2 millones de pesos.
El municipio justifica el aporte no reintegrable en priorizar a los usuarios y evitar mayores inconvenientes en el sistema de transporte que ya sufre -sin aviso- una reducción evidente de servicios.
Por esta acción, el gobierno recibió las críticas de la oposición por generar un mal precedente de un aporte millonario cada mes a una empresa privada y sin una ordenanza que lo respalde.
Además del aporte municipal, Mi Bus recibe cada mes 2,8 millones de pesos que otorga el Gobierno nacional y otros 7,1 millones de pesos pagados por la Provincia. En total, recibe unos 16 millones de pesos, el equivalente a los subsidios nacionales quitados en diciembre y que complicaron el funcionamiento de la concesionaria.
A estos aportes no reintegrables de los tres estamentos del Estado, la empresa suma la recaudación aportada por la tarjeta SUBE por la tarifa diferencial de pasajeros con discapacidad y jubilados, y los ingresos por el boleto que pagan los usuarios cuya tarifa mínima por viaje es de 27 pesos.
El intendente anunció meses atrás un nuevo esquema de recorridos y frecuencias en varias líneas deficitarias para achicar los costos del transporte pero hasta el momento no se instrumentó.
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