Qué hacer si tenés pasajes y una aerolínea deja de volar, o suspende el vuelo
Frente a lo que pasó con la low cost Viva Air, es importante saber qué pasa si tenés pasajes y una aerolínea deja de volar. También te contamos los pasos a seguir si te reprograman o cancelan el vuelo.
La semana pasada cientos de pasajeros, algunos de ellos argentinos, se vieron afectados por el cierre de la aerolínea Viva Air.
Hace una semana la aerolínea low cost colombiana Viva Air suspendió sus operaciones alegando dificultades financieras y dejó a cientos de pasajeros varados en los aeropuertos, entre ellos, cinco amigas neuquinas se habían ido de vacaciones a Colombia. Frente al caso de la low cost hay que repasar qué cosas debés tener en cuenta en estas situaciones.
“Estamos a la deriva, muy angustiadas. Somos laburantes y tenemos que volver a trabajar. No sabemos cómo, ni cuándo vamos a poder volver”, decían las viajeras neuquinas por esos días varadas en el aeropuerto. Era una medida inesperada y con efecto inmediato en varios pasajeros, que no sabían cómo volver a sus casas, si tendrían un reembolso o debían comprar otro pasaje.
Según lo estipulado por las leyes argentinas, las líneas aéreas debe procurar mediante todos los medios necesarios el cumplimiento del servicio; ya sea con otra línea aérea o devolviendo el dinero necesario para poder contratar un nuevo pasaje y de esa manera completar el itinerario.
Si la compañía aérea es responsable de la cancelación o el retraso del vuelo en al menos cuatro horas, existen dos opciones: la redirección o el reembolso. Cabe aclarar que el plazo de cuatro horas aplica para Argentina. En otros países la normativa local define el plazo.
Redirección: La aerolínea organizará un vuelo de sustitución al mismo destino. Esto incluye cualquier vuelo de conexión que esté disponible, siempre y cuando sea con la misma aerolínea. Como opción pueden, aunque no estén obligados, ofrecer volar con una aerolínea diferente.
Si la reprogramación del vuelo es posterior al vuelo original, se tiene derecho a solicitar la comida y el alojamiento que se necesite mientras se espera el nuevo despegue. Es importante recordar guardar los recibos de todos los gastos, aunque la aerolínea sólo cubrirá los “gastos razonables”.
Reembolso: Además del reembolso, también se tiene en este caso derecho a una indemnización. Es conveniente reclamar la indemnización de inmediato. Los plazos para presentar este reclamo varían de país en país, pero siempre hay que hacerlo lo antes posible.
Y si la compañía aérea no supo dar una solución, se debe llamar al seguro de viaje. La mayoría de las pólizas cubren desde pérdida de equipaje hasta cancelación de vuelos.
Qué hacer frente si la aerolínea quiebra
Según un especialista en el tema, la normativa para estos casos es de 1998 y merece una actualización, ya que no distingue la respuesta que la empresa tiene que dar según los pasajeros se encuentren en su lugar de residencia o en un tramo de su itinerario, o requieran una atención especial
Sugiere que todos los viajeros que se vean afectados por un conflicto de este tipo deben: guardar toda la documentación que acredite que se abonó el servicio que finalmente no se utilizó (vouchers, tickets o recibos), guardar los tickets de los gastos que se realizaron como consecuencia del vuelo que no se pudo utilizar, contactarse con algún empleado de la línea aérea para manifestar lo sucedido y tratar de dejarlo asentado para que se brinde una respuesta, afirmó en conversación con Clarín Santiago Aramburu, abogado especialista en el tema.
Si no hay respuesta por parte de la empresa, iniciar un reclamo formal (en sede administrativa o en la justicia) para la devolución del dinero, y en caso de encontrarse varado solicitar a otra empresa la prestación del servicio, o adquirir un nuevo pasaje y guardar las constancias para un posterior reclamo judicial o administrativo.
“La situación de cierre de la aerolínea Viva Air y otros casos similares ponen en relieve la necesidad de actualizar la normativa para contemplar estas situaciones, e incluir variables tales como las distancias, si los afectados están o no en sus lugares de residencia al momento del conflicto; y situaciones particulares ya sea con menores o personas con discapacidad”, sostuvo Aramburu.
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