…y la Banda siguió tocando ¿hasta morir?
Reabrir escuelas sin fuertes testeos, rastreo y aislamiento de contactos eficaces conducirá a la propagación dentro de las escuelas y en las comunidades, lo que finalmente obligará a volver al aprendizaje remoto.

«Y la Banda siguió tocando» es una gran película cuasi documental con actores como Richard Gere de HBO que muestra la aparición y expansión del SIDA en el mundo en 1980. Es una increíble investigación epidemiológica que, seguro, no es muy distinta de la que se puso en marcha en el mundo a partir de los primeros casos de covid 19. Se las recomiendo a mis alumnos de posgrado y al público en general. La película muestra descarnadamente no solo la acción del virus sino también el contexto político y económico que dificultó el avance de la investigación y aseguró miles de muertes que se podrían haberse evitado.
En una escena de la película, Don Francis, un investigador del CDC, participa en una conferencia con los dueños de los bancos de sangre a quienes les presenta pruebas preliminares que el SIDA se transmite por transfusiones de sangre y que 8 hemofílicos han muerto (ellos precisan muchas transfusiones). Quiere el CDC que analicen la sangre. Los dueños de los bancos de sangre y las autoridades de salud se niegan. Don Francis estalla y les grita “cuantos hemofílicos deben morir para justificar la inversión ?. Dennos una cifra: cien? mil? Para que les convenga salvar vidas en lugar de matar” .
Ahora, en plena segunda ola de covid- 19. Que discutimos. Ya no de vacunas. Todas las que se aplican en Argentina son seguras y eficaces. Creo que el grueso de la población ya se convenció de esto a pesar de la sangrienta campaña de desprestigio sobre las vacunas. Entonces. Que pasa con los jóvenes y las escuelas. Es el tema. Y la información científica, como todo en covid tiene una evolución acelerada del conocimiento. Pero podemos hacernos las mismas preguntas que Don Francis. ¿Cuantos muertos son necesarios para actuar con firmeza ? La pregunta ahora es a nuestros gobernantes. El Presidente parece que no se banca ni los 8 e intenta actuar.
Veamos. En noviembre de 2020 una publicación de Lancet especializada en niños y jóvenes publica un artículo de la Universidad de Londres que plantea que la reapertura de las escuelas, junto con la relajación gradual de las medidas de cierre inducirán una segunda ola tres meses después si son abiertas a tiempo completo y que puede demorarse un par de meses si se adoptara un sistema de rotaciones a tiempo parcial. En cualquier caso, la segunda ola daría como resultado que R se elevará por encima de 1 y una segunda ola resultante de infecciones será de 2 a 3 veces el tamaño de la onda covid-19 original. La única opción para evitarlo son altísimas tasas de testeo y aislamiento de positivos. Es lo que hacemos ? o esperamos 100? 1000?.
En marzo, también un modelo matemático de Londres señala que, si bien la reapertura de grupos de años seleccionados en la escuela primaria causa un bajo riesgo de transmisión a gran escala, la reapertura de las escuelas secundarias podría resultar en brotes que afectan hasta 2,5 millones de hogares si no se mitigan.
Ahora bien, ya no se discute en las ciencias. En los últimos meses, nuestra comprensión del covid-19 ha sido moldeada aún más por los datos emergentes, y ahora se entiende que los niños son tan susceptibles a la infección como los adultos y tienen una carga viral similar durante la infección, incluso si son asintomáticos (y muchos chicos son asintomáticos). (ver Plos One de marzo, trabajo de la Universidad de Texas). Aun no hay publicaciones sobre las secuelas que covid deja en los niños. Ya saldrán.
En síntesis, los hallazgos sugieren que el debate entre los riesgos para la seguridad de los estudiantes y los beneficios del aprendizaje presencial enmarca una falsa opción dual. La reapertura de las escuelas sin fuertes testeos y rastreo y aislamiento de contactos eficaces conducirá a la propagación dentro de las escuelas y dentro de las comunidades, lo que finalmente obligará a volver al aprendizaje remoto y dejará un rastro de infección a su paso.
El Journal Europeo de Epidemiología acaba de publicar en su número de abril un artículo de Brasil cuyo titulo es “Segunda hola de covid. Los jóvenes están en riesgo”. Es un hecho, la proporción de jóvenes internados aumenta, incluso en terapia. El virus muta y se adapta.
Entonces: si vemos venir una tormenta de nubes negras y relámpagos podemos pensar que no va a llegar y no hacer nada, podemos pararnos bajo un árbol cruzando los dedos o podemos guarecernos bajo techo hasta que pase la tormenta que, en nuestro caso, implica una alta proporción de vacunados.
En Río Negro ya llueve en Bariloche y va subiendo en varias ciudades. En CABA y el conurbano ya llueve fuerte. En Río Negro tenemos una fortaleza que es el histórico programa de inmunizaciones. Ya avanzamos con personal de salud, docentes, policías, mayores de 70 y de 60. Pero falta. Hay que guarecerse, mas barbijo y distanciamiento.
Mueven los gobernantes. Y sus votantes. Esperamos 100 ? mil ? que estallen las terapias ?
* Doctor en epidemiología. Exsubsecretario de Políticas de Salud de Río Negro, docente de Epidemiología en Salud Pública, carrera de Veterinaria UNRN.
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