Piedrazos y golpes en violento desalojo de inquilinos en Junín

Una familia desalojada por los adjudicatarios originales de una vivienda social de esta localidad intentó recuperar la posesión del inmueble ayer y se trenzó a golpes de puño, piedrazos y palazos con las personas que estaban dentro de la propiedad, ante la dificultad de la policía provincial de evitar los desmanes.

La casa, ubicada en la calle Peuma al 44, en su intersección con Vidal Pérez, del barrio 101 Viviendas, finalmente fue desalojada por orden judicial y quedó con consigna.

Una vez alcanzada la calma, los involucrados se denunciaron mutuamente en la comisaría 25, en las que adujeron daños por lesiones.

Todo comenzó el martes en horas de la tarde, cuando la adjudicataria del plan social Mirta Nahuelcura ingresó a la vivienda, según adujo su inquilina Roxana Aguilar, y habría golpeado a sus hijas menores de edad, para echarlas y luego dejar sus ropas y muebles en la calle.

Ayer, mientras efectivos policiales hacían guardia en el lugar, Aguilar junto a su marido Jorge Catalá y otros familiares reingresaron a la propiedad, a la que habían apedreado previamente, y se trenzaron a golpes de puño y con objetos contundentes contra las personas que estaban dentro.

Los sucesos fueron filmados por “Río Negro”, se pueden ver en la web del diario, y muestran una trifulca que la policía recién pudo controlar más de diez minutos después, cuando arribaron al lugar 6 patrulleros y una camioneta carrozada de la Unidad de Detención de refuerzo. Además, se llegó una ambulancia del hospital local.

Según explicó el director de Seguridad de la policía, Edgardo Navarrete, también se dio intervención al área de Desarrollo Social de la Municipalidad, a fin de que asistiera a los inquilinos, que cuentan con familiares en la localidad pero serían oriundos de Allen.

El barrio 101 Viviendas tiene 5 años de haber sido adjudicado y, de acuerdo al relato de los vecinos, esa propiedad nunca fue habitada por la adjudicataria original, sino que fue sucesivamente alquilada.

El matrimonio de Aguilar y Catalá aseguró que pagaba 6.500 pesos en concepto de alquiler desde hace dos meses, pero que al peder dominio del bien les fueron sustraídos los recibos. Además, acusaron un faltante de 45.000 pesos, producto de la venta de una camioneta.

En una entrevista con este diario reconocieron que la propietaria les había solicitado a mediados de junio que se la devolvieran.

josé cusit

El pedido de desalojo y la agresión a una joven

Según los desalojados, uno de los detonantes de la reacción violenta fue la supuesta agresión a una joven integrante de la familia.

“Entré a la vivienda (ayer) porque le pegaron a mi hija, cuando vi todas mis cosas tiradas en la calle me volví loco, a mí nadie me regaló nada”, dijo Catalá al ser consultado. “Estaba muy angustiado”, manifestó. Los dueños de la vivienda no hicieron declaraciones.

Luego de la pelea, todos los involucrados fueron trasladados hasta el hospital para verificar su estado de salud y luego hasta la comisaría 25 para prestar declaración testimonial. No hubo detenido.

La familia que alquilaba dijo que pagaba 6.500 pesos por mes para habitar la casa del barrio 101 Viviendas, adjudicado hace unos cinco años.

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