Demolieron la escuela y deben mudar a unos 300 alumnos

La primaria N° 133 “Juan Keidel” del barrio Uno de Plaza Huincul no comenzará el ciclo lectivo en el edificio propio. Deberán mudarse porque la obra de reconstrucción que empezó a fines de enero, demandará al menos ocho meses. Ahora, lograron encontrar un espacio adecuado para funcionar y se deberá iniciar la mudanza para permitir que los trescientos niños y el personal se instalen y puedan asistir a clases.

Este es el segundo año lectivo con dificultades para esta comunidad educativa. El año pasado, lo comenzaron en abril porque las rajaduras halladas en algunas aulas del viejo edificio que originalmente perteneció a YPF cuando era estatal, ya dejaba evidenciar su deterioro.

Hubo suspensión de clases, hasta que llegaron las “aulas trailer” y se terminaron los primeros trabajos. Se anunció la construcción de un nuevo edificio en el mismo predio que luego de los trámites administrativos de rigor, recién se comenzó con los trabajos en enero de este 2017.

“Empezaron con la demolición del edificio en enero. Es una obra grande porque es de demolición, construcción de nuevos espacios y reacondicionamiento de algunos otros”, indicó a directora Gabriela Ledda, quien por estos días debió buscar, consultar y gestionar por otro lugar porque en principio, se había pensado que podían acomodarse en un determinado espacio mientras la obra se ejecutaba pero la empresa no lo admitió.

“Cuando viene la empresa, nos comunica que ellos por convenio no permiten que haya gente en el predio por una cuestión de seguridad. Nos pareció fantástico porque sabemos que podía haber accidentes”, explicó.

Y allí comenzó el peregrinar para encontrar un edificio adecuado al dictado de clases, aunque no fuera una escuela. Desde el Consejo Provincial de Educación, se les ofreció el CPEM N° 58, en la planta baja. Sin embargo, esta opción fue descartada porque los nenes iban a tener que compartir espacios con los adolescentes que cursan en el nivel medio.

Otro fue los talleres que dejó libre la EPET N° 10 en barrio Central. Pero las aulas no eran suficientes, de todos modos iban a requerir “aulas trailer” y los baños están afuera. El patio, en días de lluvia sufre anegamiento. La otra alternativa era la casa adaptada del barrio 25 de Mayo en Cutral Co, donde hasta que se mudó a su edificio propio funcionó la Laboral Especial N° 1. “Todos los chicos que asisten acá son de barrios Uno y Central. Las familias se tenían que trasladar hasta allá pero además es una casa, no podíamos funcionar”, acotó.

“En el centro de capacitación entramos todos, hay ocho aulas y tenemos que compartir con la 123 el patio y comedor”

Gabriela Ledda, directora de la 133 Juan Keidel.

Inicio de clases con la tarea pendiente

La comuna de Huincul fue la que ofreció el edificio donde funcionó la escuela 123 como asiento temporario de la 133.

No se podrá dictar materias especiales pero el sitio es el más adecuado que se halló.

Se debe hacer una mudanza del mobiliario del centro y luego del establecimiento temporario y una limpieza.