¿Quién se anima a caminar a 330 metros de altura y sin baranda?

La Torre Jinmao de Shanghái, uno de los rascacielos más altos del mundo (420 metros de altura), inauguró ayer una pasarela de cristal sobre la que los visitantes podrán caminar por el exterior del edificio desde su último piso, el número 88. Los turistas podrán dar la vuelta alrededor del edificio a una altura de 340 metros, mediante una pasarela con suelo cristalino, sin barandas y de tan sólo 1,20 metros de ancho. No apta para cardiacos o enemigos del vértigo.

De todos modos, los visitantes serán provistos de correajes de seguridad y casco al salir a esa plataforma exterior, y estarán acompañados por empleados del edificio. El paseo costará entre 40 y 53 euros por persona. Con esta nueva atracción se busca aumentar la cifra de visitantes en el rascacielos.


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