9 mitos nutricionales y la verdad que esconden

Ningún alimento, por sí mismo y de manera aislada, tiene poderes mágicos. La nutricionista Gabriela Zabalza analiza estos preconceptos y nos ayuda a resolver estas cuestiones.

Ningún alimento, por sí mismo y de manera aislada, tiene poderes mágicos sobre nuestra salud. Con frecuencia vemos en consultorio las dudas que genera tanta información circulando en redes, muchas veces errónea, contradictoria y/o incompleta, que termina opacando con preocupación y hasta con culpa el preciado momento de prepararnos la comida y sentarnos a la mesa.
Son muchos los preconceptos a la hora de elegir o relacionarnos con los alimentos. Aquí dejamos un puñado de los que suelen reiterarse, para que empecemos a mirar a los alimentos de una manera más integral:

1.- La papa engorda.


Ningún alimento “engorda” ni “adelgaza” por sí mismo. La papa, junto a batata, choclo y mandioca, es un vegetal feculento, aporta principalmente almidón y micronutrientes como potasio e incluso pequeñas cantidades de calcio y vitamina C. Se la clasifica dentro del grupo de cereales y legumbres, por aportar una cantidad importante de hidratos de carbono complejos, similar composición a este grupo de alimento. Se la puede incluir sin problema dentro de los planes de reducción de peso, cuidando la cantidad, la forma de preparación y la combinación con otros alimentos menos energéticos.

2.- La banana previene los calambres.


La banana es buena fuente de potasio, mineral que tiene relación con los calambres. Pero la producción de los mismos es multifactorial, es decir que son varios los motivos por los cuales una persona puede sufrir calambres: deshidratación, falta de entrada en calor o elongación después de un ejercicio, falta de minerales, falta de descanso, tabaquismo, entre otros. Entonces, si necesitamos hacer una intervención para prevenir calambres, habrá que evaluar todos los factores.

3.- Dejé las harinas porque quiero bajar de peso.


Recordemos que por harina entendemos al producto que se obtiene de la fina molienda de cereales y otros vegetales. La más utilizada es la harina de trigo, pero también tenemos harinas de maíz, de arroz, de avena, de cebada, de garbanzos, de soja, de algarroba, etc. Si necesitamos una reducción de peso no nos limitaremos a restringir un tipo de alimento, sino que se evaluará, en todo caso, la inclusión de harinas más integrales y menos refinadas, las cantidades en cada porción, la combinación con otros alimentos, el momento del día para incorporarlas, entre otros factores.

4.- La naranja exprimida, ¿buena o mala?


La naranja es una excelente fuente de Vitamina C, azúcar simple de la fruta (fructosa), fibras y agua. Si la exprimimos, concentramos su energía y nos quedamos con el aporte de azúcares, agua, vitaminas y minerales, ideal para cuando necesitemos energía rápida o aumentar el aporte calórico de nuestra dieta, por ejemplo. Si en cambio la comemos entera, estaremos aportando toda su fibra, que nos exige masticación, más tiempo de digestión por enlentecimiento del vaciado gástrico y por ende, aumento de saciedad. Entonces, si usamos exprimidor o cuchillo y tenedor, dependerá en líneas generales de los objetivos nutricionales.

5.- La alimentación vegetariana/vegana no es segura.


El patrón de alimentación vegetariano o vegano es seguro para cualquier etapa de la vida, pero debe ser llevado adelante, de manera obligada, bajo la supervisión de un especialista, para evitar falencias de nutrientes y enfermedades en el corto o mediano plazo. Cuando este tipo de patrón alimentario está bien planificado y se logra llevar a la práctica de manera correcta, su impacto para la salud es positivo.

6.- El huevo es malo porque tiene colesterol.


El colesterol es una molécula que además de estar presente en los alimentos, es fabricada por nuestro propio cuerpo. En laboratorio nos miden el nivel de colesterol y, siendo uno de los factores que tiene relación con las enfermedades cardiovasculares, buscamos mantenerlo en niveles normales en sangre. El huevo resulta un alimento con importante aporte de proteínas completas, muy versátil en la cocina y que no merece ser catalogado de “malo” por su aporte de colesterol en su yema, en la que además vehiculizan otros nutrientes interesantes como Vitaminas A, D y E o minerales como el Zinc. Por lo tanto, frente a una hipercolesterolemia, deberá consultar a su especialista para conocer cómo controlar el aporte de colesterol a través de los alimentos (recordemos que el colesterol es exclusivamente de origen animal) y demás factores que no pueden perderse de vista: aporte de fibra, actividad física, consumo de alcohol, control del peso saludable, etc.

7.- La palta engorda.


La palta aporta principalmente grasas saludables, buena cantidad de fibra dietética y vitaminas y minerales (por ser de origen vegetal no aporta colesterol). Se la clasifica dentro del grupo de los aceites y las semillas. Tiene alto poder nutritivo y es una aliada a la hora de aumentar la cantidad de energía de la preparación. La cantidad recomendada de palta tendrá que analizarse en relación a los demás alimentos que aportan grasas dentro del día y de acuerdo al objetivo que esté buscando quien la consuma.

8.- No como legumbres ni vegetales crudos porque me inflama.


Legumbres y vegetales crudos contienen fibra dietética, componente natural de los vegetales que son fermentados por bacterias en el intestino. Esta fermentación es saludable para mantener la integridad de la mucosa intestinal y evitar cuadros como estreñimiento o diverticulitis. Para aquellas personas que no toleren los efectos de esta fermentación (flatulencia, malestar intestinal) se aconseja incluir la fibra de manera gradual y bajo la supervisión de un especialista.

9.-Me tomo un jugo detox y listo.


Un jugo verde o “detox” (como la moda los ha bautizado) estará principalmente hidratándonos y aportándonos antioxidantes y azúcares simples, según la hortaliza o fruta que hayamos utilizado. No son imprescindibles ni mágicos. Sepamos que los verdaderos responsables de la desintoxicación de nuestro organismo son el hígado y los riñones.

10:- Por último, pequeños recordatorios para tener siempre presente:
– La inclusión o suspensión de alimentos en la dieta deben analizarse en el contexto de cada persona y según su momento de crecimiento y desarrollo (niño/embarazada/anciano/etc), su situación clínica, su rutina de entrenamiento, etc.
– Si buscamos mejorar nuestra salud, la nutrición será un pilar fundamental, pero al mismo tiempo tendremos que darle la mano a la actividad física, al buen descanso, a la buena hidratación, a la ausencia de tóxicos (alcohol, tabaco).
– Ningún artículo sobre nutrición reemplaza una consulta con su Nutricionista.
Si tienen más mitos, creencias o inquietudes, no duden escribirnos por IG a @flowsportperformance o por mail a lic.gzabalza@gmail.com

Lic. Gabriela Zabalza
MP 353- Nuricionista


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