A un año de la cuarentena: el recorrido dispar del virus en las principales ciudades

Las estrategias de prevención y contención fueron diferentes en Rio Negro. Las disputas partidarias también incidieron en el resultado de esas políticas públicas. Viedma tuvo 23 semanas consecutivas sin contagios.

El virus circuló de una manera diferente por el territorio rionegrino.

Viedma tuvo el primer caso de la provincia, el 6 de marzo, en la Semana Epidemiológica 10, pero después de ese episodio pasó 23 semanas sin contagios, en medio de un escenario con fuertes controles que involucraron a todas las estructuras del Estado, además de los actores públicos y privados del sector salud.

En Roca esa coordinación no fue posible. Al principio de la pandemia hubo gestos de colaboración entre el municipio y el gobierno provincial. Cuando los casos empezaron a aumentar y se hizo necesario tomar medidas para restringir la circulación de los vecinos, volvieron las rispideces que marcaron el vínculo entre las autoridades locales y rionegrinas durante los últimos años.

El episodio de los terraplenes sobre los puentes que comunican el norte y el sur de la ciudad marcó el pico de tensión. Nunca nadie se hizo responsable por esa medida, que se desactivó a las pocas horas, por la reacción negativa de los propios roquenses, que incluso fueron a derribar las montañas de tierra colocadas sobre el Canal Principal de Riego.

Luego de eso, las relaciones políticas mejoraron, pero el municipio lentamente se alejó del escenario principal de toma de decisiones. De esa manera, el comité interinstitucional que se había conformado en marzo quedó desarticulado.

En Cipolletti, la ciudad que tuvo los tres casos confirmados posteriores al de Viedma, el primer fallecido de la provincia y un sanatorio privado clausurado, con el consecuente estado de preocupación en su comunidad, tuvo un crecimiento marcado de la curva desde la Semana Epidemiológica 30, es decir 140 días después que el covid-19 se instalara en la provincia.

De todas maneras, durante la etapa más crítica para la provincia (semanas 42 y 43) se dio allí el mayor número de contagios: 666 en apenas siete días.

En Bariloche el ritmo de contagios no tuvo grandes saltos desde la Semana 31, pero siempre se consideró a la ciudad como escenario de una “meseta alta” de nuevos casos.

Lo particular de la ciudad cordillerana es que el pico de positivos no ocurrió durante 2020 sino este año.

La combinación entre actividad turística y la densidad poblacional (es el punto con mayor cantidad de habitantes de la provincia) llevó a registrar 802 casos en la segunda semana de enero y 830 en la etapa siguiente.

Letalidad

Con respecto al impacto irreversible del coronavirus en las principales ciudades rionegrinas, las estadísticas oficiales indican que en el período transcurrido desde que se declaró la pandemia, en Bariloche se registró el mayor número de muertes, alcanzando a 237 personas.

En Cipolletti fueron 165 y en Roca 118, mientras que en la capital provincial hubo que lamentar hasta el momento 100 fallecimientos.

Cruzando esos datos con la población de cada ciudad, el mayor índice de letalidad se presenta en Cipolletti, con un 2,63%, superando levemente a la media provincial.

En Viedma es del 1,87%, en Roca del 1,79% y en Bariloche del 1,61.

Ministro Zgaib: «Por el momento no se analiza una restricción en la circulación. Eso también es una lección aprendida”.

“El sistema de salud no dejó a nadie sin atender”


El ministro de Salud de Río Negro, Fabián Zgaib, dijo no tener dudas sobre la llegada de una segunda ola de covid-19 al país y a la región, pero indicó que por el momento no está en la agenda del gobierno la implementación de medidas que restrinjan la circulación, como la vigente desde el 20 de marzo del año pasado.

“Eso también es una lección aprendida”, resaltó el titular de la cartera sanitaria provincial en diálogo con RÍO NEGRO, aunque aclaró que nunca pueden plantearse escenarios definitivos ante el escenario dinámico de la pandemia.

Zgaib planteó que hacia el futuro, lo más importante es avanzar con la vacunación de las personas mayores de 60 años y aquellos que forman parte de grupos de riesgo.

En tanto, sobre el camino recorrido desde la declaración de la cuarentena en todo el país evaluó que fue un proceso complejo, “en el que nos fuimos armando a medida que pasó el tiempo y que pudimos definir la estrategia con Nación”.

Destacó que “desde el punto de vista provincial, armamos y triplicamos las camas, además del ingreso de casi 800 personas para diferentes sectores del sistema de salud”.

Entre los desafíos que se presentaron, mencionó que “fue mucha la dispensa en el sistema, entonces debíamos cubrirlos, algo que después también sucedió con los contagios entre el personal”.

Otro aspecto complejo fue el relacionado con el precio y el stock de medicamentos para Terapia Intensiva. Algunos valores pasaron de 90 a 1.100 pesos y fue necesaria la intervención de Nación para regular el sistema.

El ministro destacó el trabajo del “ejército” de personas que se dedicó al seguimiento de contactos estrechos. “Nadie sabe todo lo que hay detrás de cada positivo que no se internó”, resumió.

“El sistema de salud no dejó a nadie sin atender”, puntualizó antes de afirmar que “la red intrahospitalaria funcionó muy bien, con derivaciones de acuerdo a las necesidades de cada zona y un acompañamiento muy importante de Nación, desde lo epidemiológico y en el equipamiento”.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios