El rosario de Cristina

Francisco Galeano

A partir de enero de 2022, Cristina luce una nueva imagen: un rosario en su cuello. Sabemos que CFK estudió en un colegio religioso, el Misericordia de La Plata, pero aun así no se casó por Iglesia, ni usó rosario alguno en su visita al Papa en el Vaticano o en los tedeums a los que asistió en la Catedral metropolitana. Algo la ha llevado a aferrarse a un rosario a partir de este año.

La primera aparición pública en que lució un rosario en su cuello con él fue el 27 de enero de este año en Honduras, para la asunción de Xiomara Castro. A partir de ese día, lo ha usado en cada oportunidad que aparece ante el público.

Lo hizo en marzo en el Senado, en oportunidad del tratamiento del acuerdo con el FMI; el 14 de abril para la apertura de la sesión plenaria de EuroLat; el 2 de abril en el homenaje a excombatientes del Congreso de la Nación; en mayo en oportunidad de recibir el Doctorado Honoris Causa en la Universidad Nacional del Chaco Austral; en junio en la CTA de los Trabajadores y otra vez el 8 de julio, en la inauguración del teatro municipal de Calafate.

La última vez que pudimos ver su nueva imagen fue este martes 23 de agosto, al presentar su descargo por la causa “Vialidad”, esta vez más nerviosa y acelerada que de costumbre, pero con la oratoria y contundencia magistral de todos sus discursos.

Un día antes, en el marco de esa causa, el fiscal Diego Luciani requirió el decomiso de unos 5.321 millones de pesos para ser destinados a instituciones de bien público, dado que para la fiscalía ese es el monto del supuesto perjuicio para el Estado. Pero lo más polémico fue el pedido de doce años de cárcel e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos a la actual vicepresidenta.

Para otros 12 acusados también se pidieron penas de entre 2 y 12 años. Entre esta docena estaban el empresario Lázaro Báez, el exministro de Planificación Federal, Julio De Vido y el exsecretario de Obras Públicas, José Francisco López.

Un poco de historia: Julio De Vido fue funcionario K durante 35 añitos corridos, desde 1987 y hasta la finalización de la presidencia de Cristina. En esas tres décadas y media ocupó los cargos de Director General de Obras Públicas del Instituto de Desarrollo Urbano y Vivienda (1987-1990), de Presidente de la Administración General de Vialidad Provincial (1990-1991), fue Ministro de Economía y Obras Públicas de la Provincia de Santa Cruz (1991-1999) y luego su culminación como funcionario K cuando asciende al cargo de Ministro de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios de la República Argentina, en las presidencias de Néstor Kirchner y Cristina Fernández.

Otro récord similar lo tiene el ingeniero López. En 1990, con 30 añitos y a solo 4 años de haberse recibido de ingeniero civil, Julio Francisco López ya había sido nombrado por el intendente Néstor Kirchner como Secretario de Obras Públicas de la Municipalidad de Río Gallegos. Durante los próximos 32 años, es decir hasta la finalización del mandato presidencial de Cristina Kirchner, sería junto a De Vido la mano derecha de la familia K en la temática de obras públicas provinciales y nacionales.

López desempeñó funciones en el directorio de la Administración General de Vialidad de Santa Cruz (1991-1994), fue presidente del directorio del Instituto de Desarrollo Urbano y Vivienda de Santa Cruz (1994-2003), miembro del Consejo Nacional de la Vivienda de la Nación (1994-2003) y miembro del Consejo Nacional de la Vivienda (1995-1996). Pero seguramente lo más “lucrativo” fue ser el Secretario de Obras Públicas de la Nación por 12 años, es decir durante las 3 presidencias K

Pero podemos pensar que Julio López, fiel adlátere de la familia K durante más de 30 años, no cayó en desgracia por haber sido descubierto tirando los bolsos, sino al momento de declarar que el dinero de los bolsos se lo dio el exsecretario de Cristina Kirchner, Fabián Gutiérrez. Según la declaración de José López, él había recibido la instrucción de cambiar de lugar esos nueve millones de dólares. Gutiérrez lo llamó en nombre de Cristina, recibió los bolsos en su domicilio de la capital. López pidió ser un imputado protegido por la Justicia, no volver al penal de Ezeiza y procurar una mejor situación procesal a causa del peligro que corría su vida.

Como si se tratara de la película “El Padrino”, el cuerpo del exsecretario de Cristina Fernández, Fabián Gutiérrez, fue encontrado el 5 de julio del 2020, enterrado y con el cuello cortado en un terreno próximo a una vivienda en la ciudad El Calafate. Víctor Fabián Gutiérrez, había declarado haber participado en el traslado de valijas supuestamente con dinero, pero que nunca certificó y nunca fue parte del Programa Nacional de Protección a Testigos e Imputados.

Esta gente no es muy confiable, así que una parte de estos 9 millones prolijamente acomodados por López en la puerta de un convento, pudieron provenir de la ruta del dinero K y otra de un retorno de Nicolás Caputo, el amigo del alma de Mauricio Macri. Esto lo sabemos ahora, después de enterarnos de la notoria intimidad entre Julito y Nicky que muestran los whatsapp del celular secuestrado al primero, a los que hizo alusión Cristina en su descargo. Pero más allá del tema de quien aportaba más retorno, Cristina jura no haber notado nada anormal en la obra pública de sus funcionarios que la acompañaron por más de tres décadas.

¿Hay alguien que pueda pensar que Néstor primero y Cristina más tarde pudieran no haber registrado la enorme cantidad de irregularidades en la contratación de obras públicas? ¿Puede alguien pensar que con la inteligencia y formación universitaria y política de ambos, ninguno de los dos notara el crecimiento patrimonial de estos tres sátrapas?

Ya lo dijo el eselentísimo presindente Alberso Frenandez en A dos Voces: Cristina es inocente. Acto seguido aclaró que, el hecho de que los Kirchner le vendieran a Báez una decena de inmuebles, le dieran el gerenciamiento de sus hoteles en Calafate y éste abonara cifras millonarias por el alquiler de salones o el alojamiento de sus empleados durante años en esos hoteles, puede no ser ético, pero no es delito. Con la lógica de Fernandez, el contrato entre el Hotel de la Presidenta y Aerolíneas Argentinas para alojar las tripulaciones de los vuelos de AA, sin seguir los mecanismos de contratación previstos por la ley, tampoco es ético, pero no es delito. Aunque se tratara de 26.000 noches en el Hotel Alto Calafate, por la suma de 16 millones de pesos de aquella época.

Más allá de decirnos que Macri es la personificación de todos los males, Cristina no pudo o no supo cómo explicar su estrecha relación comercial con Lázaro, ni su complicidad o negligencia para advertir la millonaria estafa al fisco de sus adláteres más conspicuos. Hace bien en procurar una ayuda divina con un rosario. Además de acompañar en el rezo y animar a la meditación de los Evangelios, el rosario se usa para pedir concretamente por lo que necesitamos. Luego de escuchar los alegatos del fiscal Luciani, entendemos por qué puede haberse generado este cambio.

Igual si es condenada un 30% o 40% pensará que es lawfare, o persecución judicial, y si es absuelta, un 30% o 40% pensará como yo, que este ispa no tiene arreglo.

DNI 11.350.919

General Roca


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