Diseñan en Río Negro una plataforma para silla de rueda adaptada al sector agrario
El prototipo busca garantizar el derecho de acceso a la educación en ámbitos rurales, a personas con discapacidad motriz. Un aporte que favorece la inclusión y genera más oportunidades.
Accesibilidad. El prototipo facilita el tránsito seguro en condiciones de terreno suelto.
Por INTA.
Según estadísticas de la Agencia Nacional de Discapacidad, actualmente en la Argentina el 48,8% de la población mayor a 6 años que tiene alguna discapacidad presenta un alto porcentaje de dificultad motora. Dentro de este rango, el mayor porcentaje de esa población (61,1%) tiene una dificultad motora inferior (para caminar o subir escaleras).
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Con el objetivo de fortalecer la inclusión escolar en todos sus niveles, el área de mecanización del INTA Valle Inferior junto al área de Higiene y Seguridad del Centro Regional Patagonia Norte diseñaron y desarrollaron el prototipo de una plataforma para sillas de ruedas tradicional aplicada a trabajos en el sector agrario, facilitando de esta manera el tránsito en condiciones de terreno suelto. Este proyecto surgió de la necesidad imperiosa de aportar al sector agrario fortaleciendo la inclusión.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) se considera que la discapacidad es toda limitación en la actividad y restricción en la participación, originada en la interacción entre la persona con una condición de salud y los factores contextuales (entorno físico, humano, actitudinal y sociopolítico) para desenvolverse en su vida cotidiana, dentro de su entorno físico y social, según su género y edad. La limitación en la actividad se refiere a “las dificultades que un individuo puede tener en el desempeño/realización de las actividades”. En ese sentido, la discapacidad es un fenómeno complejo que refleja una relación estrecha entre las características del ser humano y las características del entorno en donde vive.
Dato
- 48,8%
- Porcentaje de la población con alguna discapacidad que presenta un alto porcentaje de dificultad motora.
En este contexto, un equipo de profesionales del INTA Valle Inferior se preguntó ¿Qué sucedería si una persona con capacidad motora reducida elige estudiar una carrera como Ingeniería agronómica? Tiene derecho pero, ¿es viable?
El interrogante se planteó en Viedma cuando en el año 2020 Milagros, una estudiante de la Universidad Nacional de Río Negro, requirió iniciar sus prácticas en la chacra experimental del INTA para realizar las recorridas a campo y visitar los ensayos. Horacio Pallao, responsable de Seguridad e Higiene del INTA Patagonia Norte relató: “Junto con los referentes del área de mecanización agrícola nos reunimos con el docente a cargo para plantear la dificultad de acceso y nos sentimos interpelados, cuestionándonos con respecto a lo que se podría hacer para favorecer la inclusión de quienes requieran transitar en ámbitos rurales, por motivos de educación y/o trabajo”.
Considerando la complejidad y esencialmente promoviendo la diversidad, se contempló fortalecer la inclusión educativa en todos sus niveles. En esa línea, los profesionales diseñaron y desarrollaron el prototipo de una plataforma para que las sillas de ruedas tradicionales puedan aplicarse a trabajos en el sector agrario, facilitando de esta manera el tránsito seguro en condiciones de terreno suelto.
“Inicialmente se realizó un relevamiento para conocer modelos existentes y no se encontró ninguna silla de ruedas cuyo cuadro estructural favoreciera el traslado de las personas en suelos arados y bajo ensayos”, remarcó Pallao. Además, señaló que realizaron un relevamiento y no encontraron en el mercado una fábrica de sillas de ruedas que considere o adapte su estructura para incursionar en el sector agrícola.
Desarrollaron y diseñaron el prototipo de una plataforma para que las sillas de ruedas tradicionales puedan aplicarse a trabajos en el sector agrario.
Por su parte, Agustín Servera –referente de mecanización agrícola de esa unidad– explicó que la primera etapa, la plataforma se diseñó para que los propios compañeros traccionen la plataforma y el usuario sea quien la direccione. “Se realizaron algunos estudios de biomecánica para optimizar la ergonomía, tanto del que tracciona como del que direcciona, y tenemos pensado a futuro automatizar la plataforma mediante tracción eléctrica, brindando de esta manera autonomía plena al usuario”, señaló.
En la actualidad esta plataforma brinda el servicio en la Escuela Secundaria de Formación Agraria Nº 11 de la ciudad de Viedma –Río Negro–, favoreciendo la inclusión de personas con capacidades diferentes en todas las actividades educativas que se realizan en ella.
Dato
- 61,1%
- Porcentajes de las persones con un alto porcentaje de dificultad motora que tiene una dificultad motora inferior.
“Estamos comprometidos con la salud del personal y preservación del ambiente de trabajo, no solo para los agentes de la institución, sino también del público que visita las instalaciones”, señaló Pallao y reflexionó: “entendemos que este un desarrollo importante, pero somos conscientes que estas acciones deben ser parte de políticas de promoción y difusión del trabajo y acceso para las personas con discapacidad en organizaciones estatales, privadas y académicas”.
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