El Instituto de Viviendas de Bariloche sale en busca de los morosos

El presidente del Instituto, Javier Giménez, estimó que el pago en término no supera el 10%.

El cumplimiento de los adjudicatarios de lotes sociales y los beneficiarios de tableros eléctricos comunitarios en las tomas con los pagos que deben efectuar en forma mensual al Instituto de Tierras y Viviendas se derrumbó desde el inicio de la pandemia y el organismo lanzó una “moratoria” en el intento de mejorar la recaudación y evitar que se agranden las deudas.

 El presidente del Instituto, Javier Giménez, dijo que la morosidad es “enorme” y estimó que el pago en término no supera el 10%.

 En el caso de los tableros eléctricos son más de 800 las familias abarcadas, principalmente en los barrios 29 de Septiembre y Alun Ruca, y cada una debe pagar una suma fija de 750 pesos mensuales.

 Giménez dijo que esa cifra surgió de un convenio que ya está vencido y adelantó que el año próximo habrá uno nuevo, con montos actualizados.. Admitió que el sistema es “muy injusto” porque todos pagan lo mismo pero los consumos son desiguales. “Hay mucha gente atrasada y si uno va comprueba que no todos tienen indigencia: hay hasta comercios, hay viviendas con muchos artefactos eléctricos y  hay otras con solo cuatro bombitas”, explicó.

 El llamado es para que los habitantes de las tomas regularicen sus pagos y el Instituto a su vez pueda abonarle a la CEB. Según Giménez, los tableros representan un costo mensual de 8 millones de pesos y el municipio no paga puntualmente, sino que acuerda periódicas “compensaciones” con la prestadora eléctrica.

 Dijo que el suministro en las tomas mediante los tableros es más seguro que si la gente se “colgara” de la red en forma individual, pero también genera conflictos porque “hay sobrecargas todo el tiempo, saltan los fusibles” y el municipio debió asignar personal permanente para realizar las reparaciones. “El pago de la mensualidad también está para cubrir ese costo”, señaló Giménez.

 La dirigente barrial del 29 de Septiembre Patricia Millalonco dijo que “efectivamente hay mucho atraso” pero en los últimos días “los vecinos se están acercando a pagar”. Admitió que algunos llegaron a acumular atrasos de hasta 35.000 pesos. El Instituto de Tierras les permite suscribir planes de pago de hasta 18 cuotas, sin interés.

La cobranza por los lotes

 Giménez dijo que la moratoria abarca también a quienes han recibido lotes del municipio en adjudicación directa. La mayoría están ubicados en los barrios del Alto, y algunos en la zona oeste.

 El cumplimiento en el último año fue bajísimo, admitió el funcionario. Los acuerdos de venta, según la antigüedad que tengan, se han pactado a un valor que varía entre los 200 y los 1.000 pesos el metro cuadrado de terreno, a pagar en 10 años. Según Giménez, hay cuotas mensuales de 1.500 y de hasta 3.000 pesos.

 Dijo que las adjudicaciones no corren riesgo pese a que un incumplimiento acumulado en los pagos de hasta seis meses podría derivar en la “pérdida de derechos” para los beneficiarios. “Eso está escrito, pero nunca se ha hecho”, puntualizó Giménez.

Señaló además que “el municipio cobra siempre el mismo valor, sin intereses y necesita que la gente pague en término porque es un sistema solidario, el dinero recaudado sirve para realizar otros planes”.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios