El MPN: otra historia

Neuquén

No coincido con la lectura histórica de la Dra. Favaro ni con su afirmación respecto de la última elección provincial.


Podrá admitirse la calificación de “neo” peronista que se generalizó en el ‘62 y el ‘63, para denotar a las expresiones que – en todo el país – se apartaron de expresas instrucciones del líder para competir electoralmente (Movimientos Populares, Tres Banderas, etc.) Pero no cabe duda que la integración ideológica original del MPN era claramente peronista, lo que no puede negarse pese a las críticas ortodoxas por la “desobediencia”. Y por eso es incorrecta la afirmación de que adhirió al gobierno de Illia, pues la afinidad no tuvo otro origen que la promesa de convocar a elecciones sin proscripciones, lo que no ocurrió.

También en otra ocasión los electores del MPN, algunos muy a su pesar, cumplieron con el compromiso de apoyar la fórmula nacional mayoritaria en el Colegio Electoral. Los gobernadores siempre han tenido relación con el gobierno nacional de turno, y es verdad que aún durante las dictaduras lograron conservar poder provincial. No hubiera subsistido de otro modo el proyecto original, que fue precisamente el de no dejar la provincia en otras manos.


Finalmente, es más incorrecto aún sostener que el MPN volvió a ganar las elecciones. Precisamente es la primera vez que el partido – hoy de heterogénea composición ideológica – pierde una elección provincial. Solo por las colectoras pudo retener la gobernación y ganar la intendencia de Zapala. La diferencia fue de 3%. Si se tiene en cuenta el desastroso armado de Unidad Ciudadana, el resultado merece un análisis político profundo y circunstanciado.

Julian A. Alvarez DNI 7.574.027


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