El alquiler con derecho a compra: la oportunidad para adquirir equipos fotovoltaicos

Ante el aumento de tarifas, una empresa propone el leasing: una alternativa para facilitar el acceso a la producción de energía renovable a través del alquiler de equipos con posibilidad de compra. El arrendamiento dura cinco años.

Argentina tiene un desafío entre manos en los próximos meses: administrar la escasez internacional de gas y el anunciado aumento de tarifas. Ante este contexto, la empresa ALP Group propone una alternativa que consiste en el alquiler y la financianción para que sus clientes accedan a equipos fotovoltaicos. El arrendamiento dura cinco años.

«Con la ley de energía distribuida, la posibilidad de inyectar excedentes a la red de distribución permite empoderar al usuario, que pasa a tener un rol activo con respecto a su consumo de electricidad», remarcó el socio fundador de ALP Group, Ignacio Ayanz. Así, quienes incorporan tecnología fotovoltaica, «mejoran su estructura de costos frente a la competencia que mantiene el 100% del consumo de red eléctrica», marcó.

Para ello, la empresa permite «adquirir paneles fotovoltaicos mediante un leasing (alquiler con derecho a compra) a cinco años. Esta herramienta financiera permite el acceso a este tipo de energía renovable sin inmovilizar capital y generando ahorros de manera inmediata en el consumo eléctrico y también ahorros impositivos por la deducción del canon mensual y amortizaciones«, explicó.

La cuota mensual incluye un mantenimiento preventivo anual. Los paneles solares que ofrece la empresa se incluyen dentro de la clasificación Tier uno, «lo que significa que tienen 25 años de garantía de generación«, aseguró el referente.

Una vez terminado el plazo establecido para el leasing el cliente obtiene una producción de energía durante 20 años más sin gastos asociados. «La adquisición de un panel actúa como una pre-compra de energía, generando previsibilidad«, ante un contexto de incertidumbre al corto plazo, señaló.

Según la firma, adquirir equipos fotovoltaicos trae beneficios económicos para las empresas: «a modo de ejemplo, en provincias con tarifas promedio superiores a 6,5 pesos el kilovatio hora (kW/h) y asumiendo un ajuste sólo de la mitad de la inflación por año, el ahorro en el consumo eléctrico hace que un proyecto de 20 kw se repague en cinco años«.

A su vez, con la ley 27.424 de energía distribuida, «hay beneficios impositivos en las provincias adheridas a la ley lo cual permite acortar el plazo de repago de la inversión a cuatro años en lugar de cinco, como consecuencia de la aplicación del Certificado de Crédito Fiscal», remarcó el referente. Esta ley permite que el usuario pueda autoabastecerse de energía eléctrica y en caso de haber excedente, inyectar a la red de distribución.

Por eso, las empresas pueden encontrar una estrategia de reducción de costos cuando se adquieren estos equipos, lo que les permitirá «hacer más eficiente su negocio y colaborar con el cuidado del ambiente a través de la utilización de energías limpias», expresó. En efecto, el aprovechamiento de esta generación eléctrica «reduce la huella de CO2 y evita el uso de fuentes contaminantes«.

La secretaría de Energía informó en enero de este año que la cantidad de kW instalados y conectados a la red casi se triplicó: en enero de 2021 estuvo en los 3599 kW mientras que en 2022 llegó a 9.824 kW. La provincia de Córdoba concentró el 59% de esa potencia instalada por dos factores: «porque las tarifas en Córdoba son unas de las más caras del país y por los altos niveles de radiación de esa provincia».


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