Cipolletti: cómo es por dentro la cantina española que es furor desde hace 4 semanas
Su dueño y la arquitecta Ana Silvetti comparten el producto final de este emprendimiento que se suma a la gastronomía del Alto Valle.
Una pieza fundamental para llegar a lo que hoy es “María Ramona”, la cantina española que fue inaugurada hace 4 semanas atrás en Cipolletti, la configura Ana Silvetti, arquitecta y artífice del diseño interior y la puesta en escena de la cantina.
“Ella entendió de inmediato lo que teníamos en mente y armó el proyecto del local. Prácticamente no tuvimos que acordar muchas modificaciones de pedidos de mi parte. Llevó 5 meses de refacciones y cambios totales en el local. También se ocupó de dirigir todo. El local quedó realmente hermoso. Conjuga lo que yo buscaba, con sus toques personales. Su trabajo fue excelente”, dice el dueño del lugar, Gustavo Franco, emprendedor gastronómico cipoleño.
Ana, por su parte, admite a Yo Como: “cuando recibí esta encomienda surgió como planteo las raíces españolas, que era una cantina, un mesón de gastronomía típica, que María Ramona era su abuela que vino de Galicia y se me vinieron imágenes color rojo tomate, celeste, madera, lo doméstico, cosas de almacén, frascos con conservas y objetos de cocina. La intención no era hacer algo lujoso sino darle calidez que trasmitiera la cocina de la abuela».
Y agrega: «El estado calamitoso del local preexistente nos ponía muchos límites. Había que conjugar los recursos disponibles en ese momento y en plazo lo más acotado posible. Sea la escala o la complejidad de la obra siempre tengo en mente al arquitecto Peter Zumthor (Premio Pritzker 2009) que habla de pensar en espacios donde se perciba una “atmósfera”.
Qué podemos comer en «María Ramona», en Cipolletti
Una carta de vinos excepcional. La coctelería como estrella.
Productos locales: Nihilista como cerveza artesanal, sidra de barril de Pülku, Único Vermouth, Insomnia (gin artesanal de Cipolletti) y varias destilerías más de la zona. Comida bien auténtica, “como la de mi abuela”, expresa Gustavo Franco.
Porciones abundantes, cocina lo más casera posible, todo fresco del día, panificación propia.
Las “estrellas” de la carta: el pulpo a la gallega, la tortilla, la fugazzetta rellena, la entraña con papas españolas a la crema…
Más info:
Fotos: arquitecto Germán Curihuinca @germancurifotografia
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