Hacia una mejor gestión del recurso hídrico

En el Alto Valle de Río Negro y Neuquén, son tantas las problemáticas y actores sociales que intervienen en la operación y mantenimiento del sistema de riego y drenaje, que es difícil abordar la gestión del recurso hídrico en toda su complejidad.

Hoy cada distrito se enfrenta a múltiples desafíos, muchos de ellos estrechamente ligados a la crisis de la fruticultura y a la competencia sobre las tierras productivas sistematizadas con otros usos como el desarrollo urbano e inmobiliario, que plantean la necesidad de una planificación estratégica tanto en el seno de cada comuna como a nivel regional.

Por un lado, los menores ingresos por el cobro del canon de riego impactan directamente en la recaudación de los Consorcios y dificultan las tareas de operación y mantenimiento del sistema. Por otro, se suman día a día los kilómetros de comuneros de chacras abandonadas con nulo mantenimiento.

Pero quizás lo más relevante sea el avance de las ciudades sobre las zonas rurales, que está afectando no solo la superficie de tierras productivas sino también el curso de canales y desagües. En algunas localidades donde se priorizan las edificaciones sobre los trazados originales de la red, estos desagües y canales suelen taparse e impedir el normal funcionamiento del sistema. Las estructuras que alguna vez sirvieron como drenajes agrícolas hoy cumplen un rol de evacuación pluvioaluvional al captar los excesos de lluvia en las zonas urbanas, lo que debería asociarse al ámbito urbano y no al rural.

Históricamente la Estación Experimental Alto Valle del INTA y sus Agencias de Extensión, han trabajado junto a otras instituciones en la capacitación a regantes, productores y tomeros, y el desarrollo de ensayos a campo para mejorar las técnicas de riego y promover el uso racional del recurso hídrico.

Gracias a los avances tecnológicos, actualmente las líneas de trabajo están centradas en obtener y sistematizar información territorial y fortalecer las capacidades técnicas de cada institución sobre el uso de Sistemas de Información Geográfica (SIG). Específicamente, desde el INTA se promueve el uso del QGIS, un software de libre acceso. Los sistemas mencionados permiten generar bases de datos geográficas actualizadas con información relevante para la toma de decisiones sobre la gestión en diversos ámbitos con un enfoque territorial, en este caso en la gestión del agua: un abismo de diferencia con los registros y mapas de papel de no hace muchos años.

A modo de ejemplo, con esta información se pueden priorizar algunas acciones sobre otras: a la hora de limpiar un desagüe se analiza toda la información cargada y se establece la priorización de la tarea de limpieza.

En el caso de los comuneros, algunos consorcios también usan esta información para prorratear el tramo que le corresponde limpiar a cada usuario. Cargando los datos de niveles freáticos pueden relevarse las fluctuaciones de las napas en todo el territorio y determinar zonas críticas.

La utilización de Sistemas de Información Geográfica comenzó en 2012 junto a la Facultad de Ciencias Agrarias y los Consorcios de Regantes de Cipolletti, General Roca e Idevi (Viedma), con el objetivo de optimizar la administración y gestión de la información territorial de la que se disponía. Luego se fueron sumando los consorcios de Fernández Oro-Allen, Campo Grande, Contralmirante Cordero, Villa Regina y Valle Medio.

Los técnicos trabajan a campo relevando y sistematizando la información territorial sobre caudales, freatímetros, canales, desagües y usos del suelo, entre otros. Parte de la información es subida desde el INTA Alto Valle y sus Agencias de Extensión al visor Kairos y está disponible en forma gratuita en el link https://inta.gob.ar/documentos/visor-web-de-mapas-interactivos-mapa-dinamico.

Hoy, la labor conjunta pone el foco en la gestión del agua, donde los aportes de las instituciones vinculadas enriquecen y promueven la búsqueda de soluciones.

Quienes deseen mayor información, pueden escribir a la ingeniera Ayelén Montenegro a montenegro.ayelen@inta.gob.ar

Por: Ayelén Montenegro; Lucía Mañueco
INTA Alto Valle