Extendieron por dos meses más la prisión domiciliaria al dirigente de ODEL, Miguel Báez, en Roca

Es por las dos causas que lo tienen como protagonista. En una se aguarda la confirmación de la condena por un abuso sexual y la otra es por instigar el violento ingreso al diario Río Negro.

La jueza María Gadano decidió extender por dos meses más la prisión preventiva -en la modalidad domiciliaria- para el dirigente de la Organización de Desocupados en Lucha (ODEL), Miguel Báez, mientras concluye la etapa de investigación que lo tiene como sospechoso de instigar el violento ingreso a las instalaciones del diario Río Negro, ocurrido en marzo del 2021; y se definen su situación con respecto a la condena por abuso sexual que le fue impuesta por un tribunal de Roca.

La magistrada también ordenó continuar con las medidas de restricción impuestas a Báez con respecto a los dos procesos que se tramitan en su contra.

La audiencia se realizó vía zoom esta mañana y estuvo presente la Fiscal Jefe, Graciela Echegaray, la abogada querellante Melina Pozzer y el defensor de Báez, Oscar Pineda.

De esta manera y ante el pedido del Ministerio Público Fiscal, Gadano decidió extender por dos meses más la prisión preventiva en su modalidad domiciliaria (vencerá el 25/07/22). La misma línea siguió con respecto a las restricciones impuestas en su momento por lo que no podrá tomar contacto con la víctima del abuso sexual, ni con cualquier persona que trabaje en el Diario Río Negro, como así también la imposibilidad de hacer mención al Diario por cualquier red social.

Una de las últimas novedades que tuvo el proceso contra Miguel Báez había sido la confirmación de la condena por abuso sexual simple por parte de un Tribunal de Impugnación (TI).

Cuatro años de prisión

El 21 de diciembre del año pasado, un Tribunal de Juicio de Roca lo condenó a la pena de dos años y seis meses de prisión como autor de los delitos de “abuso sexual simple reiterado” contra una mujer. La Justicia le impuso una pena total de cuatro años de prisión, unificada con una condena previa de ejecución condicional que pesaba sobre el imputado, dictada en agosto de 2020, por el violento ingreso al municipio de Roca.

Los abusos contra una de las integrantes de su organización ocurrieron entre noviembre de 2018 y febrero de 2020 en dos locales pertenecientes a la organización ODEL, en Roca, tanto “en la oficina del imputado o en el sector usado como depósito”, donde el dirigente “abusó sexualmente mediante tocamientos”, en reiteradas oportunidades, de una mujer que se desempeñaba como empleada, “mediando abuso intimidatorio de una relación de dependencia y poder” y “siempre sin el consentimiento” de la víctima.

A la condena, Báez sumó otra causa y fue por el violento ingreso a las instalaciones del diario Río Negro por parte de referentes de su organización, en marzo del año pasado. Si bien el exdirigente de la CTA Autónoma no participó personalmente, la justicia entendió que tuvo una activa participación desde la organización y por eso le imputaron el delito de «turbación de la posesión en carácter de instigador (en los términos de los artículos 45 y 181, inc. 3° del Código Penal», un delito que prevé una pena que va desde los 6 meses a los 3 años de prisión.


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