La inestabilidad económica obliga a bolivianos de la región a volver a sus orígenes

Varias familias con años en nuestro país, emprendieron el regreso a Bolivia. 

Nadie sabe a ciencia cierta sobre cuantas familias de origen boliviano pretenden disparar del crítico presente social y económico que atraviesa Argentina, sin embargo el Consulado de ese país en la región toma nota.

Algunos emprendieron el regreso y otros expresaron su intención de volver con la frente marchita. Esta dispersión hacia el país del Altiplano fue confirmada a Río Negro por el representante diplomático, Néstor Condori Coarite, quien atiende los requerimientos de sus compatriotas en esta capital.

“Se están yendo, estuve en Allen (actividad ladrillera) y me han consultado por la documentación que tienen que llevar a Bolivia en relación a los hijos nacidos en la Argentina”, aseveró ante una consulta desde este medio en las oficinas de la Manzana Histórica.

Por caso, un relevamiento efectuado en enero pasado por la Unión Obrera Ladrillera de la República Argentina (Uolra) determinó que el 50% de los hornos ubicados en esa ciudad, General Roca y Cinco Saltos dejaron de funcionar. En ese momento, y por primera vez, saltó a luz -en forma tenue- la vuelta a casa o que los integrantes de esa comunidad fronteriza se volcaron a otra actividad.

Datos

10.000
es el número de bolivianos en la región, según el último Censo Nacional de Población y Vivienda. Sin embargo, el Consulado sostiene que la cifra podría trepar a unos 15.000.
60
son los pesos que percibe un obrero ladrillero durante una hora de trabajo.

Se trata generalmente de familias jóvenes con pocos años de residencia en la Patagonia Norte, en virtud de que hay muchos más integrantes de esa comunidad que llevan más de 30 o 40 años, con nietos, y ya se encuentran afincados definitivamente.

El representante diplomático confirmó que el motivo es la crisis económica poniendo como ejemplo que “a una familia compuesta por tres o cuatro personas ya no les alcanza, a los ladrilleros ya no es rentable la actividad porque hay mucha competencia”.

Como el radio de acción del Consulado abarca la Norpatagonia, también recibió inquietudes desde Centenario. Observó, luego de las consultas, que “quienes se dedican a la parte de chacras (medieros) se han encontrado con que los insumos suben de acuerdo al dólar, y eso es un problema”.

Dio cuenta de que “no saben cómo superar el tema” y además “no tiene casa propia, ven que los alquileres se han disparado, y nos ha sorprendido bastante”.

Puso el foco en dos sectores de actividad económica bien definida como la construcción y la agricultura, con lo cual “algunos ya se han ido, también están optando por viajar” y si bien no hay cifras “muchos nos vienen a consultar sobre que otra documentación tienen que llevar porque tienen los hijos estudiando”.

Esa representación tiene un amplio listado de trámites que los ciudadanos de ese país pueden realizar y en estos días las consultas son también por prontuarios ya que se emiten certificados de antecedentes policiales. Por ese motivo, los interesados deben tener la Cédula de Identidad con el número respectivo, para que la Policía Boliviana pueda verificar sus antecedentes.


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